El destino de la carne de pollo de EE.UU. se concretará la semana que viene
La introducción del embargo de suministros de carne de pollo americano puede ser aplazada. El destino de las importaciones será determinado la semana que viene después de la visita a Moscú del viceministro de Agricultura de EE. UU. James Miller.
La carne de pollo importada de EE. UU. siempre ha sido objeto de contradicción que al final quedaba en nada. Los expertos presuponen que esta vez la prohibición también se levantará.
Según los analistas, la inquietud de las autoridades sobre la calidad de los productos tiene un trasfondo político-económico complicado. Por ejemplo, la cuestión del ingreso de Rusia en la Organización Mundial del Comercio (OMC) queda en el aire. Es probable que el tema de la carne, muy importante para EE. UU, sea usado por Rusia como una ventaja en la nueva ronda de negociaciones con el viceministro estadounidense de Agricultura James Miller.
En Rusia entraron en vigor nuevas normas sanitarias que prohíben importar carne de pollo desinfectada con cloro. Fueron prohibidos, en particular, los suministros desde EE. UU., que constituyen el 75% de las importaciones de ese producto.
El primer ministro de Rusia, Vladímir Putin, dijo que el país está dispuesto a buscar a nuevos abastecedores de carne de pollo si los socios actuales no cumplen las normas sanitarias establecidas por la legislación nacional en materia de tratamiento de carne.