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Crónica del triunfante asalto de Königsberg hace 65 años

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Solo tres días necesitaron los grupos de asalto para romper la resistencia del principal punto de apoyo de los hitlerianos en el Mar Báltico, el baluarte Königsberg.
Crónica del triunfante asalto de Königsberg hace 65 años

Solo tres días necesitaron los grupos de asalto para romper la resistencia del principal punto de apoyo de los hitlerianos en el Mar Báltico, el baluarte Königsberg.

Los alemanes consideraban esta ciudad (actualmente Kaliningrado) la mejor fortaleza alemana en toda la historia del país. Hitler la llamaba "el bastión absolutamente inexpugnable del espíritu alemán".

La victoria del Ejército soviético en las batallas de Stalingrado y de Kursk provocó el celo de fortificación de Königsberg más intenso. La ciudad estaba rodeada por decenas de miles de kilómetros de trincheras, fosos antitanque cavados por los prisioneros de guerra, así como por ciudades bastiones de Prusia Oriental, reforzadas con fortines de muchos pisos con instalaciones subterráneas de hormigón armado. Estaban coronadas con torres blindadas (torres militares llenas de artillería).

Las tropas soviéticas lograron superar las líneas de defensa durante los encarnizados combates y rodearon Königsberg.

El veterano Oleg Rzheshevski recuerda que durante el asalto las tropas soviéticas comandadas por el mariscal Vasilevski aplicaron por primera vez la táctica de inicio del ataque por la infantería antes de terminar la preparación artillera.

Durante dos días de batalla en Königsberg los soldados del Ejército soviético limpiaron más de 230 barrios y capturaron tres fuertes fortalezas. El 9 de abril de 1945 la capital de Prusia de Este, Königsberg, cayó.
 

El comandante de la fortaleza, el general Lasch, se rindió junto a la guarnición (100.000 bayonetas). Apresaron a más de 90.000 personas, entre ellas unos 2.000 oficiales y generales. Se entregaron a las tropas soviéticas 3.500 cañones y morteros, cerca de 130 aviones y 90 tanques. Ante esta caída, Hitler condenó a Lasch a muerte por la capitulación.

Gracias a esta operación de ofensiva en Prusia Oriental, las tropas soviéticas desmontaron el principal puesto avanzado histórico del militarismo germano. También liberaron a parte del Norte de Polonia. Derrotaron por completo más de 25 divisiones nazis y desarticularon las comunicaciones marítimas alemanas en el Báltico Norte.
 

Alrededor de 200 combatientes fueron distinguidos con la Estrella de Oro del Héroe.
 

 

 

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