Los marineros rusos secuestrados por piratas somalíes regresan a su país
Los 23 marineros rusos del buque tailandés 'Tai Union-3' han regresado a su país después de permanecer más de 4 meses secuestrados por piratas somalíes.
Los tripulantes rusos del barco atunero secuestrados a finales de octubre, han llegado a Moscú, al aeropuerto de Sheremétievo, donde les esperaban sus familiares, amigos y un grupo de periodistas.
Los pescadores zarparon de Rusia hace nueve meses y permanecieron en el cautiverio somalí más de cuatro meses. Según sus palabras, durante esos cuatro meses y medio han comido solamente macarrones y arroz podrido que les bastaban sólo para no morir de hambre y han adelgazado de 15 a 20 kilogramos de peso.
Además, los piratas saquearon la nave y dejaron a los tripulantes sin sus efectos personales, declararon también los marineros.
El 15 de marzo, veinte de los 23 marineros rusos regresaron de Moscú a la ciudad de Kaliningrado, en el Mar Báltico. El capitán del atunero, Serguéi Jarlan, partió de Moscú a Minsk, la capital de Bielorrusia, donde está viviendo su familia.
Los marineros dijeron a los periodistas que creían que les liberarían. “Encontrándonos en el 'Tai Unión-3' bajo el control de los piratas, armados con fusiles de asalto y pistolas, sentíamos que llegaría la hora de la liberación. Comprendimos definitivamente que ya no éramos rehenes cuando navegábamos hacia las Islas Seychelles escoltados por el remolcador de rescate ruso SB-36 y bajo la vigilancia del patrullero 'Neustrashymyi' de la Flota Báltica”, mencionó Alexánder Yeftéev, mecánico del barco.
Según algunas fuentes, los secuestradores exigieron tres millones de dólares como el rescate del navío. Actualmente, una nueva tripulación, también procedente de la ciudad de Kaliningrado, se ha hecho cargo del barco en sustitución de los marineros recientemente liberados.
El pesquero 'Tai Unión-3' es uno de los numerosos barcos secuestrados por los piratas somalíes en esa zona, algunos de ellos también con marineros rusos entre sus tripulaciones.
Un grupo de piratas somalíes capturó el barco atunero, de bandera tailandesa y armador de Singapur, en el Océano Índico, el 29 de octubre del año pasado. La embarcación fue capturada en apenas 40 minutos, cuando se dirigía del puerto de Victoria, en las Islas Seychelles, a una zona de pesca de atún.
La tripulación de la nave estaba compuesta por 27 personas, 23 de ellos de nacionalidad rusa, dos filipinos y dos ciudadanos de Ghana.
El capitán ruso de la embarcación, Serguéi Jarlan, resultó herido por un disparo en un brazo durante el abordaje del pesquero. Al parecer, los piratas confundieron la linterna que portaba el capitán con una pistola y abrieron fuego contra él. Tras recibir asistencia médica en un hospital costero, el marinero regresó al navío.