Eva Longoria se suma a la oposición contra la ley de Arizona
La actriz estadounidense, Eva Longoria al igual que muchas personas, está en contra de la ley antiinmigrante de Arizona, por lo que se sumó a la oposición al considerar que esta legislación puede llevar a la discriminación.
Longoria de ascendencia mexicana comentó que se ha involucrado en una campaña de artistas para recaudar dinero y así ayudar a abogados, porque entiende que la mejor manera de combatir la ley SB1070 es que las cortes superiores la revoquen.
“Creo que la inmigración es un asunto federal, así que no me parece particularmente beneficioso que los estados la tomen en sus propias manos y refuercen las leyes punitivas cuando son inconsistentes con el plan nacional sobre la inmigración”, dijo este miércoles en una conferencia de prensa en la Ciudad de México, donde dio a conocer los pormenores de la película 'Cristiada'.
Longoria destacó el papel que han tenido los hispanos en la historia estadounidense desde la Primera Guerra Mundial hasta el presente.
Añadió que ha trabajado mucho para impulsar una imagen positiva de los latinos en Estados Unidos, quienes en busca de un mejor porvenir han ido a ese país, aportando y trabajando por el bienestar común.
“Es importante sacar a la luz esas historias que muestran cómo los latinos hemos cambiado el panorama (de EE. UU.) de una manera hermosa”, comentó.
Además señaló que no cesará en su activismo y que convocará a otras personas para continuar en su lucha contra esa legislación.
"Soy estadounidense e3 novena generación; soy más estadounidense que muchos de mis amigos anglosajones. Si mi papá es detenido por el color de su piel o por su aspecto, por supuesto me voy a sentir furiosa" dijo Longoria anteriormente.
La ley SB1070 entró en vigor recientemente en Arizona, pero sin los elementos más polémicos, como los que obligaban a los agentes de Policía a comprobar el estatus migratorio de una persona a la que hayan detenido por otras razones. La aplicación de otra sección que obligaba a los inmigrantes a llevar siempre la documentación que demuestre que se encuentren de manera legal en el país, así como la sección que convertía en delito el que los inmigrantes indocumentados pudieran pedir empleo en lugares públicos.
La jueza federal de Estados Unidos, Susan Bolton ordenó el bloqueo de esas polémicas partes de la ley antiinmigración. Sin embargo, la gobernadora de Arizona, Jan Brewer presentó la apelación a la decisión tomada por Bolton ante el Tribunal Federal de Apelaciones en San Francisco, donde se estudia el caso.