Un gigante industrial alemán demanda a su Gobierno por haber prohibido colaborar con Rusia

La empresa Rheinmetall estaba a punto de finalizar la implementación del contrato de la construcción de un centro de entrenamiento del Ejército de Tierra ruso en el polígono de Múlino (provincia de Nizhni Nóvgorod), cuando el Gobierno federal alemán prohibió que concluyera la operación a raíz de las sanciones impuestas contra Rusia por la UE.

SEPA MÁS: ¿Cómo puede afectar la crisis en Ucrania al comercio militar entre Rusia y Europa?

Actualmente ya ha sido remitida a la autoridad de control del comercio y la exportación del país la correspondiente demanda en nombre de Armin Papperger, el consejero delegado de Rheinmetall, informa el diario alemán 'Süddeutsche Zeitung'.

De acuerdo con Papperger, la compensación que exige la compañía a su Gobierno asciende a 120 millones de euros, puesto que el contrato fue cerrado en 2011 por un importe total de 100 millones de euros y no estaría sujeto a las sanciones, impuestas a Rusia en 2014.

SEPA MÁS: Rusia advierte a la UE del fracaso si la trata como un "socio menor"

'Süddeutsche Zeitung' informa que Rheinmetall ya tiene preparados y cargados con equipo y maquinaria 70 camiones con destino a Rusia. Sin embargo, la decisión del Gobierno federal de Alemania obligó a la compañía a detener el cumplimiento del contrato y a pagar las demandas financieras presentadas por Rusia.

Cabe recordar que las compañías europeas ya han perdido, según varias estimaciones de expertos occidentales, entre 21.000 y 40.000 millones de euros de facturación debido a las sanciones contra Rusia.