"Disparar a una persona es genial". ¿Qué opinan veteranos de EE.UU. sobre sus primeras víctimas?

Lonnie 

Lonnie era un joven atemorizado cuando mató a su primera víctima, un soldado del Ejército del Vietcong.

Ese momento que cambió su vida se produjo en un bosque de Vietnam; notó la presencia de su enemigo entre los árboles mientras buscaba ayuda sanitaria para su compañero. 

"Era un hombre joven, como yo, solo que él estaba en su propio país intentando evitar que un hijo de puta como yo lo invadiera. [...] Resultó que yo no luchaba por Dios, ni por el país, por nada. Todo eso se va a la basura cuando matas a tu primera persona. Todo se convierte en un fraude, te mintieron", dice.

Daniel

Políticamente inconsciente en cuanto a la guerra de Vietnam, Daniel se alistó al Ejército para no perder la ciudadanía de EE.UU. Su primera víctima fue probablemente un hombre joven al que una mina instalada por él le arrancó las piernas.

"Pensé en su pareja, su familia. Creo que esto me afectó mucho. Sentí pena por él".

Josh 

La primera víctima de Josh fue, al menos desde su punto de vista, una representación gráfica en maquinaria de tecnología avanzada que utilizan actualmente los soldados para disparar a distancia. Josh participó en la primera guerra de George W. Bush contra el terrorismo. Mató a su primera persona nada más llegar al territorio de Afganistán y no sintió ninguna lástima. 

"La guerra fue fantástica. [...] Me sentía como si mis antepasados estuvieran dentro de mí. No hay nada más varonil que ver a los helicópteros volando por encima mientras disparas contra un grupo de tíos... o disparas a una persona. Es algo genial", concluye.