La coalición liderada por EE.UU. contra el EI se deshace mientras los aliados árabes 'se esfuman'
Las principales potencias árabes, consideradas en un primer momento como indispensables para la lucha contra el Estado Islámico en Siria e Irak, estarían reduciendo su implicación en la campaña militar liderada por Estados Unidos, poniendo en entredicho las afirmaciones del Gobierno de Obama sobre el alcance de la coalición formada por sus aliados en la región, informa 'The Washington Times'.
Según el diario, mientras el Gobierno de Obama sale constantemente en defensa de la coalición de 65 naciones unidas para luchar contra el Estado Islámico, los críticos afirman que en torno a una decena de naciones ya no contribuye significativamente a la campaña. El apoyo de aliados árabes clave como Jordania, Arabia Saudita, Bahrein y Emiratos Árabes Unidos se han ido evaporado, sostiene 'The Washington Times'.
Un ex alto funcionario del Gobierno de Obama explica este fenómeno argumentando que las potencias árabes del Golfo Pérsico hicieron una apuesta estratégica para centrar sus recursos militares en ayudar a Arabia Saudita en su guerra contra los rebeldes Houthi en Yemen, esperando que EE.UU. y la UE llevaran a cabo la lucha contra el Estado islámico.
Según algunos expertos de seguridad en Oriente Medio, la Administración Obama no ha hecho muy buen trabajo al frente de la coalición con aliados como Turquía, Alemania, Reino Unido, Australia y Francia, mientras que las potencias árabes han ido perdido su entusiasmo inicial.
"Esta es una coalición de 65 paises de los que solo unos nueve están haciendo algo", dijo Anthony Cordesman del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales en Washington. Según opina, el fallo se debe en parte a la incapacidad para articular con claridad el objetivo de la campaña de bombardeos contra los extremistas en Siria e Irak.
El debate sobre la eficacia de la coalición liderada por Estados Unidos contra el EI se ha intensificado durante la ola de ataques terroristas internacionales perpetrados recientemente por los yihadistas, entre ellos el derribo de un avión de pasajeros ruso en Egipto, un doble ataque suicida en Líbano y un ataque coordinado el pasado 13 de noviembre en París que dejaron cientos de víctimas.