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Venezuela lidera la agenda mediática de España... sólo en campaña
No hubo un día sin que se hablara de ella, allanó tapas de los principales medios españoles, sus problemas fueron más importantes que las dificultades del país europeo y fue tema obligado en el discurso de casi todos los candidatos. Sin embargo, después de las elecciones, desapareció de la prensa.
Como por arte de magia, desapareció. Después de haber sido la candidata principal en la opinión pública española, Venezuela salió del ojo de los diarios y justo después de las elecciones.
Un seguimiento realizado por El Diario evidencia cómo el país suramericano pasó de aparecer en dos de cada tres tapas de medios españoles, a una que otra nota desperdigada sin mucho cuidado en las sábanas de papel.
"Tras las elecciones, Venezuela solo ha aparecido en el 4,4% de las portadas de los diarios impresos más importantes", refiere ese rotativo, que añade que en 16 días, los principales periódicos españoles dedicaron 36 primeras planas a la situación política de un país ubicado al otro lado del Atlántico.
Uno de los picos de atención fue durante la visita a Caracas del líder del partido conservador Ciudadanos, Albert Rivera, quien irónicamente pasó casi inadvertido en los medios venezolanos, salvo por su aparición con una de las representantes de la oligarquía económica del país, Lilian Tintori.
En ese mismo olvido están las iniciativas que realizó la derecha española para tratar de perjudicar al gobierno de Nicolás Maduro, y buscar rédito político en España de cara a los comicios. El ejemplo más revelador involucra a Rivera.
Muchas selfies, pocas medicinas
La imagen de Albert Rivera y Tintori en la Puerta del Sol de Madrid no sólo robó el centimetraje de la prensa internacional, sino que reventó las redes sociales. El motivo del encuentro era la "recolección de medicinas" que supuestamente serían enviadas a Venezuela de inmediato para atender una "crisis humanitaria".
Afortunadamente para Rivera y Tintori, el país suramericano no contaba con esas medicinas para suplir los anaqueles de fármacos porque todavía no han llegado. Ni llegarán.
Una investigación, publicada por el periodista Daniel Plager en el portal Konzapata, detalla que los organizadores de la colecta jamás tuvieron en cuenta la logística para almacenar y enviar los fármacos, que aún siguen arrumados en un depósito de Madrid después de un lío que ha implicado denuncias, señalamientos por robo y peleas dentro de las filas opositoras.
Lo irónico es que, parte de lo recolectado sí fue destinado a venezolanos: los que "la están pasando mal" en Madrid, dice uno de los entrevistados de Plager, quien fue acusado después por otro grupo de opositores de "robarse" pañales para regalarlos a los venezolanos que están sin empleo y sin dinero en la capital española.
Otro trabajo publicado por La Marea hace énfasis en ese detalle: aunque la convocatoria fue para recolectar medicinas, la mayoría de las entregas fueron pañales de celulosa y fármacos que están por vencerse.
"Estamos intentando ayudar a los venezolanos, no a envenenarlos", dijo en un vídeo el opositor Pedro Aparicio, quien resguardó temporalmente las donaciones en las instalaciones del medio de comunicación que dirige y luego se quejó de la falta de coordinación de los organizadores de la colecta.
Aparicio, para más señas, también es dueño de uno de los medios de comunicación que con más saña atacan al gobierno del presidente Nicolás Maduro. El nombre que le puso a su rotativo es un plagio de una publicación homónima en Venezuela, cuya línea editorial es más cercana al chavismo: El Correo del Orinoco.
Nazareth Balbás
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