El cártel que derrumbó 'la muralla' de la Ciudad de México desde adentro

Hace cinco años, grupos de traficantes de ropa, autos y armas de los barrios populares de Morelos, Doctores y Tepito, famoso por ser el punto de venta de mercancía de contrabando de todo el país, se unieron ―de ahí su nombre―  para frenar a los grandes cárteles del país que intentaban controlar el centro de la capital.

Tras repeler a La Familia Michoacana y el Cártel de Sinaloa, este grupo pasó a tomar el papel de los cárteles y les ganó el negocio: el mercado de las drogas.

El periodista José Gil Olmos, colaborador del semanario 'Proceso' y autor de importantes libros en México como 'Los brujos del poder' y 'Batallas de Michoacán'  cuenta que La Unión se creó como una organización de barrio que tiene su fortaleza en eso.

"Se conocen, son familiares, amigos, se forma una especie de cofradía que los fortalece y en ese grupo tienen sus formas de vida. Tienen un culto popular, el de la Santa Muerte, pero también de San Judas Tadeo", explica Gil Olmos.

La Unión salió a la luz con el secuestro de 13 personas en el bar Heaven, en la Zona Rosa de la capital y su posterior aparición sin vida en una fosa en 2013. BBC destaca que fue "el episodio más violento de la capital mexicana en los últimos 40 años".

"Cambian de giro y hay ya una serie de acciones que nos indican su presencia en colonias de moda como La Condesa y La Roma", revela el periodista.

Estas dos colonias son donde jóvenes de clase media alta acuden y tienen gran popularidad. La habitan personas de otros países: Francia, Italia y Argentina.

Son las colonias más gentrificadas de la Ciudad de México. En ellas se instalan restaurantes, bares, cantinas y, de acuerdo con el periodista, son un mercado propicio para las drogas.

"La Unión ingresa de manera natural a controlar la venta de cocaína, metanfetaminas, marihuana", relata Gil Olmos.

Así, La Unión comienza con el control de la zona a través de una red de 'dealers'. Comienza a extorsionar a dueños de restaurantes y cantinas y cafeterías. Tan sólo en 2015, en La Condesa, hubo tres ejecuciones de restauranteros y dueños de bares en plena calle.

"Eso no se había visto en la Ciudad de México", revela Gil Olmos. 

La capital deja de ser una fortaleza

Guillermo Gazal preside Procentrhico, (Asociación de Comerciantes Unidos para Protección del Centro Histórico de la Ciudad de México), surgida en 1985 tras los sismos que sacudieron al país. 

En la década de los noventa, los comerciantes de la capital comenzaron a vivir asaltos. Llegó el ambulantaje, relata Gazal. Después se comenzó a cobrar una cuota semanal por seguridad.

En los últimos cinco años, la cosa empeoró. La cuota se transformó a un derecho de piso:

"Robos, asaltos, secuestros, a mi hijo hace unos años me lo secuestraron. A su servidor, por un día. Es una ciudad desde el corazón de la república. Queremos seguridad que está en manos del hampa", resalta Gazal en entrevista con RT.

Hoy, la Ciudad de México entra a la disputa del territorio de los distintos grupos, cuando ya estaba rodeada en el Estado de México por La Familia Michoacana y el Cártel del Golfo.

La Ciudad de México, ejemplifica el periodista, era como una gran ciudad de Medioevo: fortificada por su policía.

"Pero los villanos comenzaron a entrar", explica el periodista. "La gran muralla de la Ciudad de México se derrumbó", ejemplifica .

Una serie de homicidios en el barrio de Tepito en los últimos cuatro meses alertaron a las autoridades.

Sin embargo, capturó apenas este 17 de agosto a Francisco Javier Hernández Gómez, alias Pancho Cayagua, por dos meses por la Procuraduría General de justicia de la capital, acusado de homicidio, portación de armas de uso exclusivo del ejército, venta de drogas al menudeo y de extorsionar a comerciantes de Tepito, Roma y Condesa. 

De acuerdo con una nota de El Universal, al final, el capo chilango, como se le dice popularmente a los habitantes de la Ciudad de México, estableció convenios con La Familia Michoacana, el Cártel de Jalisco Nueva Generación y Los Zetas.

Sin embargo, el portal Terra cuenta en una nota del 2013 que en La Unión hay elementos del antaño Cártel de Tepito, que operaba desde la década de los noventas. Ahí da cuenta de una división y purga por el poder interno entre La Unión en Tepito y La Unión de Insurgentes.

Una investigación del epriódico Reforma asevera que La Unión fue auspiciada desde el comienzo por el famoso narcotráficante hoy detenido Edgar Valdez Villareal, alias 'La Barbie'. 

El jefe de gobierno de la capital, Miguel Ángel Mancera, rechazó que existieran grupos del crimen organizado.

"Cuando sale a la luz la existencia de La Unión sus argumentos oficiales se caen por sí mismos y sale que en la Ciudad de México hay crimen organizado chilango" cuenta José Gil Olmos.

"Zetas, La Familia, están aquí. Sí existen, ¿sabe qué pedimos? Sentémonos a la mesa para tratar este gravísimo problema", exige Gazal.