"Simio de mierda, eres el próximo en la lista": amenazas de muerte al presidente de SOS Racismo

Moha Gerehou es el presidente de SOS Racismo en España. Es un periodista negro, de Huesca y de origen gambiano, que mantiene una intenso activismo social contra el racismo, que se refleja en su cuenta Twitter, bastante activa.

Uno de sus tuits de ayer llamó la atención de varios tuiteros, que respondieron de manera agresiva y notablemente racista. El tuit de Moha fue éste: 

Algunas de las réplicas incluyeron amenazas de muerte, por lo que Moha las denunció a la policía a través de la propia red social:

Aún hoy continuaba la lluvia de comentarios racistas contra Moha Gerehou, que los exhibe en su propia cuenta de Twitter para llamar la atención sobre este problema y contribuir a una movilización social concienciada contra el racismo:

No es la primera vez que el presidente de SOS Racismo sufre "ciberacoso" racista en Twitter. Hace unos meses, un usuario "subastaba" a Moha como si fuera un objeto, dando pie a burlas y comentarios racistas de otros usuarios. Moha también lo puso en conocimiento de la Policía: 

Poca confianza en la Justicia

Tras las últimas amenazas de muerte, de las que se han echo eco varios medios de comunicación, la Policia se ha puesto en contacto directamente con él para comenzar la investigación de los hechos. Tal como informa 'Eldiario.es' "tras dar a conocer en redes sociales estas amenazas, el activista ha recibido la respuesta de la Policía: 'Hola, Moha. Sentimos que de nuevo seas objeto de tuits tan deleznables. Los investigadores de la UIT ya están con ellos. Se pondrán en contacto contigo'. Por su parte, Twitter ha suspendido las cuentas de los usuarios que aparecen como autores de las amenazas".

Sin embargo, por la experiencia que tiene en estos desagradables asuntos, Moha no se muestra precisamente optimista al respecto del funcionamiento de la Justicia española en este ámbito: "Ahora, tras recibir amenazas de muerte, uno se cuestiona la efectividad de la denuncia. De qué me sirve reportar a la justicia un hecho sobre el que inclinará su balanza a los siete meses o a los cinco años con un tratamiento digno de conflicto vecinal. Obviando además que de piso te puedes cambiar, pero no de color de piel", escribe Moha en un artículo publicado en el mismo medio. 

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En un comunicado hecho público ayer por SOS racismo, la asociación reclama mecanismos claros de denuncia de delitos y de protección a las víctimas, que sean conocidos por las potenciales víctimas y por la sociedad en general; una acción rápida y efectiva de persecución de los delitos por parte de autoridades policiales y judiciales; y voluntad política para la elaboración urgente de una Ley Integral contra la discriminación así como una Ley de protección de víctimas de delitos de odio –que proteja a ésta independientemente de su situación administrativa- que amplíe el concepto de delito de odio a otros supuestos recogidos en el Código Penal. Además, hacen un llamamiento "a toda la ciudadanía a que abra los ojos antes este problemática, apoyando a las víctimas y haciendo patente su rechazo a las actitudes racistas y xenófobas en todos los ámbitos de la vida, para que desaparezca la sensación de impunidad, de ausencia de reprobación social, de actos racistas y xenófobos".