El fin de la moratoria amenaza con descarrilar el proceso de paz
El reinicio de las obras de construcción en Cisjordania ha tenido grandes repercusiones en la arena política internacional, indicó el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.
Además del secretario general de la ONU, políticos de varios países como Rusia, Francia y Estados Unidos se han pronunciado contra el fin de la moratoria a la construcción pues perjudica el diálogo de paz con Israel.
Ki-moon lamentó que Israel no anunciara una extensión de la moratoria que impuso en noviembre pasado por diez meses, que se cumplieron el domingo 26 de septiembre, y expresó "decepción" por la posición de Netanyahu sobre los asentamientos judíos.
El secretario general de la ONU reiteró la petición hecha la semana pasada por el Cuarteto para Oriente Medio -Rusia, Estados Unidos, la ONU y la Unión Europea- de ampliar el congelamiento de las construcciones.
Las acciones vinculadas a los asentamientos en los territorios palestinos ocupados son ilegales ante la ley internacional, reiteró Ki-moon en un comunicado difundido ayer. El secretario general de la ONU convoca a Israel a cumplir su obligación de cesar esas actividades, como lo establece la denominada hoja de ruta para Oriente Medio.
Sin embargo, el líder de la autonomía Palestina, Mahmoud Abbas, anunció su decisión de seguir en la mesa de conversaciones al menos hasta que consulte el asunto con la Liga Árabe y el Partido de FATAH.
Esto ocurre después de la expiración de la moratoria que impide la construcción de asentamientos judíos en Cisjordania. Abass advirtió que el reinicio de las obras en esa región afectaría de manera negativa a las negociaciones pacíficas.
Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, había instado a los palestinos a continuar con las conversaciones a pesar de este vencimiento. Mientras tanto, según informan varios medios israelíes, cientos de colonos ya han empezado a edificar nuevas casas.