Las batallas napoleónicas en un tablero de ajedrez
Un ajedrez de oro y brillantes, cuyas figuras muestran a los emperadores del siglo XIX Alejandro I (Rusia) y Napoleón (Francia), junto con otros héroes de la Guerra Patria de 1812, puede admirarse en una exposición del Museo Etnográfico de San Petersburgo.
La invasión del Imperio ruso o, como es conocida en Rusia, la Guerra Patria de 1812, fue un acontecimiento histórico crucial para el ejército de Napoleón. El poderoso emperador se atrevió a iniciar la conquista del país eslavo, pero fracasó completamente gracias a la hazaña rusa bajo el mando del comandante en jefe Mijaíl Kutúzov. Ahora se puede reproducir la batalla más sangrienta de aquel hecho histórico, la de Borodino el 7 de septiembre de 1812 o la de la derrota de Napoleón en el cruce del río Berezina, en un tablero de ajedrez que por sí mismo es una obra maestra.
“La exposición ‘Guerra y Paz’ muestra el arte renacido de los joyeros y talladores rusos cuyo talento está encarnado en 'Ajedrez 1812', reconocido ampliamente por todo el mundo", destacan los organizadores de la muestra.
Las figuras de ajedrez tienen la fomra de soldados, oficiales, mariscales y otros héroes de la guerra. Muchos de ellos son una reconstrucción tan fiel como un retrato. Durante el trabajo los creadores tenían acceso a una amplia información facilitada por los museos rusos. Los peones llevan el uniforme de la guardia rusa Izmailovski y de la Vieja Guardia de la Guardia Imperial francesa. El 'rey negro', Alejandro I, posee un mapa muy detallado en sus rodillas con el emplazamiento de los ejércitos durante la batalla en el poblado de Borodinó, pero sólo se puede apreciar y examinar con el empleo de una lupa. El autor quiso darles el color blanco a los franceses, ya que fueron ellos los que iniciaron el ataque.
Los protagonistas de esta partida están hechos de la nefrita blanca y negra con el uso de oro y plata. Durante la creación de este juego de ajedrez también usaron más de 6.700 brillantes, 9.400 rubís y 3.200 zafiros.
Los maestros que crearon tan precioso juego durante cuatro años son de la casa joyera ‘Anna Nova’ que también muestra la colección entera de sus miniaturas. Esta obra de arte joyera, dedicada a los héroes rusos y franceses de la guerra, incluye la mesa con el tablero de ajedrez, dos armarios y una caja especial para guardar las figuras.
Es uno de los eventos que clausura el año cruzado Rusia-Francia y tanto los conocedores de la historia bélica, como los admiradores del arte de la joyería pueden gozar del pintoresco desplazamiento de dos ejercitos singulares en un campo de batalla situado sobre un tablero de ajedrez que hace un efecto de solemnidad y grandeza. Los emperadores, jefes militares y soldados otra vez están en la fila, pero esta vez ya no en el campo de la batalla, sino en de juego, grande y sabio, del ajedrez, un juego de paz.