Gastos festivos en Miami
La Federación Nacional Minorista de Estados Unidos estima que las ventas de las fiestas de fin de año podrían ser mejores que las del año anterior. Y es que después de dos navidades seguidas de indicadores decepcionantes, los expertos pronostican finalmente un incremento del comercio que podría beneficiar sustancialmente a los distintos sectores de la economía.
Sin embargo, aún quedan espacios para la incertidumbre del consumidor estadounidense. Ester Gómez solía gastar miles de dólares para asegurarse que todos y cada uno de sus familiares tuviera un regalo navideño, pero la realidad económica del país en los últimos dos años le ha hecho considerar que la mejor opción es ahorrar su dinero.
“Yo he gastado mucho dinero en compras, pero a medida que veo como van las cosas no creo que sea bueno seguir gastando como antes”, destaca Ester.
A diferencia de ella, hay quienes están tirando la casa por la ventana para luego darse cuenta de que compran desmesuradamente para desquitarse del estrés.
"¡Hay que gastar! he trabajado y sufrido mucho, me lo merezco”, afirma la consumidora Viola López.
Otros solo van a las tiendas a pasear; el dinero todavía no les alcanza como, por ejemplo, a Gustavo Soto, un consumidor que no tiene trabajo desde hace dos años.
Por otra parte, si bien las cadenas estadounidenses ofrecen a menudo descuentos para atraer a las multitudes, entender a los consumidores en tiempos de la recesión se ha convertido en una obsesión para los comerciantes. Por ejemplo, en algunas tiendas estantes redondos están posicionados de tal forma que llevan hacia la zona de los productos con mayor posibilidad de atraer la atencion del comprador.
“Este año tenemos consumidores, pero creo que se trata de una oportunidad diferente. La gente está buscando descuentos y ofertas pues existe la necesidad de ahorrar y reducir el gasto que en otros años caracterizaba a la época”, destaca Renne Lanzara, directora de ventas.
Asimismo, una novedad de este año son las compras electrónicas: de acuerdo a la cámara de comercio nacional, en la primera semana de diciembre las mismas superaron por primera vez los 1.000 millones de dólares.
En efecto: la disminución del desempleo en el país esta incentivando la liquidez y, por tanto, los gastos navideños. Sin embargo, estos indicadores son solo parciales: a pesar de que hay más dinero, la incertidumbre por la recesión aun persiste... junto al temor de perder lo poco que se ha ganado en términos económicos.