Samovares y cajas registradoras del siglo XIX, estrellas del Museo de Utensilios
En la ciudad de Gorodets, en la provincia de Nizhni Novgorod, al este de Rusia, se inauguró recientemente el Museo de Utensilios. Fue creado por el ruso Nikolai Poliakov, coleccionista privado y jefe de la Fiscalía de la provincia, que al enterarse de que en la casa había muchos objetos interesantes decidió abrir sus puertas para cualquier persona que deseara 'vivir' el ambiente histórico. El museo recoge algunos artículos típicos rusos de los siglos XIX-XX.
El museo se abrió en un edificio construido en 1906 donde se alojaba en aquel entonces la familia de un comerciante ruso. En 2010 casualmente se descubrieron en la casa antiguos objetos que tienen un gran valor histórico, como dinero y artículos para el hogar de aquellos tiempos. "Antes, había pocas cosas, todo estaba hecho para agradar la vista" dijo a los medios Nikolai Poliakov, fundador del museo.
El museo expone objetos que usaban en la vida cotidiana la gente antes de la revolución de 1917. La colección cuenta con algunas muestras exclusivas como, por ejemplo, una caja registradora única, diseñada para el cálculo de la libra. Es curioso que la máquina todavía funciona y aún calcula correctamente la cantidad recibida en efectivo y también indica sin errores la cantidad de la vuelta, pero ya no imprime cuentas. Según asegura el fundador del museo, el mecanismo llegó a Rusia desde Lituania.
Además, el museo contiene una rica colección de objetos utilitarios, tales como puertas de hornos, cerraduras o varios tipos de recipientes. En particular, en la exposición se puede ver un recipiente para calentar vino, donde se preparaban diferentes tipos de bebidas alcohólicas ligeras.
Hace unos años Poliakov, coleccionista privado y aficionado a la historia y la cultura rusa, inauguró un museo de samovares típicos de esa región, una colección que abarca más de un centenar de muestras de materiales raros y únicos para calentar el agua para el té, incluso utensilios más pequeños y más grandes. Cabe señalar que el samovar no es solo un curioso sistema para calentar el agua y mantener su temperatura. Es un vistoso fenómeno de arte decorativo ruso y de producción manufacturera.