Bloqueo fronterizo entre Perú y Bolivia restringe comida y pone en peligro las elecciones

El bloqueo del puente internacional de Desaguadero, que une Perú y Bolivia, en la protesta antiminera que llevan a cabo desde hace 19 días los campesinos de la región peruana de Puno, ha causado el paro del transporte y el desabastecimiento de alimentos en la región.

Según los datos de la policía peruana, los campesinos aymaras son los responsables del bloqueo del puente, impidiendo el ingreso de la mercadería de Bolivia que se vende en Perú o se exporta a otros países desde puertos en la costa del Pacífico. Así unos 200 camiones se encuentran varados en la parte peruana, mientras que otros 500 esperan en el lado boliviano.

Las ciudades peruanas de Pomata, Zepita, Juli, Ilave, Platería y Ácora, que se encuentran en el trayecto que conecta la frontera con la capital regional, también empiezan a sufrir la escasez de productos alimenticios y la subida de precios. Así en Puno, la capital regional, las colas de personas que intentaban sacar dinero de los cajeros de los bancos han sido extremamente numerosas en los últimos días.

Los manifestantes aseguran que estas medidas son necesarias como muestra del descontento con el ingreso de empresas transnacionales en los territorios peruanos, principalmente de la minera canadiense Bear Creack, que, según ellos, contaminará aguas subterráneas en cuanto emprenda la explotación de plata.

En caso de que el Gobierno haga caso omiso a sus peticiones de cancelar las concesiones mineras y derechos otorgados a la compañía, los campesinos amenazan con boicotear los comicios presidenciales el 5 de junio en toda la región.

Así los expertos aseguran que la suspensión de los comicios en Puno podría influir significativamente en los resultados de las próximas elecciones, ya que de este modo Ollanta Humala perdería votos claves en este territorio frente a su rival, Keiko Fujimori. Ambos se encuentran prácticamente empatados en este momento, de acuerdo con las encuestas más recientes.