La piel cae en desgracia en California
Las autoridades de la pequeña ciudad de West Hollywood, en California, han aprobado una prohibición total de la venta de productos de piel natural.
La ciudad de 35.000 habitantes cuenta con 200 tiendas, y la mitad de ellas vende ese tipo de artículos. Las pérdidas totales por esta medida podrían ascender a dos millones de dólares.
La ley entrará en vigor en septiembre de 2013, antes de esa fecha West Hollywood tiene que determinar el castigo a imponer en caso de que no se respete. La única excepción se hará para los artículos de cuero y de lana.
Los artículos de piel siempre han provocado una reacción ambigua en la sociedad, escindiéndola entre los que optan por el lujo y los que promueven la defensa de los animales.
Los defensores de los animales han acogido con satisfacción la decisión de las autoridades y han amenazado con la introducción de prohibiciones de esta índole en otras ciudades de EE. UU.
En Los Ángeles ya se han ratificado anteriormente enmiendas inusuales a la legislación. Así, los perros no tienen permiso para ladrar durante más de 10 minutos seguidos o de 30 minutos cada tres horas.
Según la decisión del tribunal, cuando un perro viola la ley por primera vez su amo deberá pagar 250 dólares. Luego la suma ascenderá hasta alcanzar los 500 dólares en caso de reincidencia y finalmente los 1.000 si se produce una tercera infracción. Esta ley fue aprobada gracias a Gary Leonard, que sufrió durante cientos de días y noches el ladrido del perro de un vecino.