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Medvédev: "Rusia necesita democracia, no caos"

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En el último discurso anual de su mandato, el presidente Dmitri Medvédev, anunció una ambiciosa reforma política, se refirió al tema candente de las protestas postelectorales, y recordó que Rusia afronta la crisis con más éxito que Occidente.
Medvédev: "Rusia necesita democracia, no caos"

En el último discurso anual de su mandato, el presidente Dmitri Medvédev, anunció una ambiciosa reforma política, se refirió al tema candente de las protestas postelectorales, y recordó que Rusia afronta la crisis con más éxito que Occidente.

Protestas postelectorales de la oposición

“Rusia necesita democracia, no caos", dijo Medvédev en referencia a las protestas callejeras que no aceptan los resultados de las elecciones parlamentarias del 4 de diciembre, indicando que "es normal que haya quienes aceptan sus resultados, y quienes los ponen en duda". "Es una reacción normal", dijo Medvédev, que fue interrumpido en numerosas ocasiones por los aplausos de la sala.

“Hemos aceptado con respeto la crítica contra algunas instituciones de poder. El derecho de las personas a expresar sus opiniones está garantizado, pero los intentos de extender la discordia son inaceptables y no permitiremos la interferencia exterior”, dijo Medvédev, que hizo un llamamiento a frenar a "los extremistas y provocadores"

Reforma política

En el núcleo de su discurso anual, cuarto y último de su mandato, Medvédev planteó una reforma política de gran calado, que habrá de pasar por la restitución de las elecciones por voto directo de los gobernadores regionales, suprimidas en 2004. “Es necesario dar a todos los ciudadanos activos el derecho legal a participar en la vida política”, recalcó.

Según el Jefe de Estado, se reducirá hasta 300.000 el número mínimo de firmas necesarias para la presentación de candidaturas a las elecciones presidenciales, y a 100.000 las firmas requeridas a los candidatos de partidos sin representación parlamentaria.

Medvédev también indicó la necesidad de introducir un régimen simplificado de registro de los partidos, de tal forma que para legalizar una formación política se requerirá como mínimo la firma de 500 personas en al menos la mitad de las regiones de la Federación Rusa.

Medvédev anunció cambios en las próximas elecciones a la Duma (cámara baja) para fortalecer los lazos entre los diputados y sus electores. Para ello propuso introducir una representación proporcional en la cámara para 225 distritos electorales.

El Jefe del Estado se mostró a favor de reforzar el proceso de delegación de comptencias del centro a las provincias, sobre todo en materia económico-sociales y aquellas que atañen a la mejora del clima inversor.

Rusia afronta la crisis mejor que Occidente

Entre los principales logros de su presidencia, Medvédev se refirió a la superación sin graves consecuencias de la crisis financiera global. Tanto es así, que pese a la incidencia de la crisis, Rusia se ha convertido en estos años en la sexta economía del mundo, registrando el nivel de inflación más bajo para 2011 (en torno a un 6-7%).

“La política anti-crisis funcionó mejor en Rusia que en muchos otros países”, remachó el presidente, que se refirió al crecimiento de la economía rusa en un 4% anual, lo que supera el índice de gran parte de las naciones desarrolladas, y agregó que la deuda de Rusia es mínima. Asimismo, Medvédev destacó que el fortalecimiento de las reservas, gracias a los ingresos del petróleo, ha sido y sigue siendo una política razonable que ha dado resultados.

Según Medvédev, "el volumen de reservas internacionales casi ha llegado a los niveles precrisis", mientras que los depósitos bancarios aumentaron casi un 80%, a la vez que crecen los préstamos. Además, destacó que se le ha brindado un gran apoyo a las compañías industriales y a las pequeñas empresas.

En la esfera de la integración de Rusia en la economía mundial Dmitri Medvédev destacó los avances positivos en la cooperación con la UE en relación a la cancelación del régimen sin visados, y el ingreso a la Organización Mundial del Comercio (OMC). “Rusia se ha unido a la OMC en sus propios términos, ahora tenemos que aprender a trabajar con eficacia dentro de la organización”, dijo Medvédev.

Ante los tiempos difíciles que atraviesa la economía mundial, Dmitri Medvédev hizo un llamamiento a no dilapidar recursos, pero sin olvidar los programas sociales cuya realización considera obligatoria. “Rusia debe mantener el nivel bajo del déficit presupuestario y de deuda”, dijo Medvédev, que precisó que es absolutamente indispensable reformar el sistema financiero mundial y estabilizar la situación económica en el mundo. En este sentido, el presidente considera “sumamente importante” la preservación de la estabilidad macroeconómica de Rusia.

El escudo sobre la mesa de diálogo

Medvédev se mostró confiado en un acercamiento en el diálogo con Estados Unidos en materia de defensa antimisil y en relación al nuevo tratado sobre la seguridad europea propuesto por Rusia.

"Estamos abiertos para un diálogo constructivo y para un trabajo concreto con nuestros socios si ellos aprenden a escucharnos”, dijo Medvédev en relación al polémico escudo antimisiles que EE. UU. planea instalar en Europa pese a las discrepancias de Moscú, que exige garantías jurídicas a Washington de que el sistema no va dirigido contra Moscú. “Esperamos un acercamiento”, indicó.

Sobre la modernización y profesionalización del Ejército, Medvédev recordó que “en el plazo de cinco años la mitad de los uniformados en las Fuerzas Armadas deberán estar "contratados”. “Para 2020 al menos el 70% de las Fuerzas Armadas deberá ser equipado con las armas y técnica militar de tecnología punta”, dijo Medvédev.

En este sentido, Medvédev recordó la reciente creación de las nuevas tropas de defensa aéreo-espacial dotadas de tecnología de última generación.

Seis millones más de rusos desde 2008

Medvédev se mostró satisfecho por la ejecución del programa demográfico, lo que ha permitido que en los últimos cuatro años hayan nacido más de 6 millones de niños, un récord para los últimos 20 años.

"La mortalidad ha disminuido, la longevidad desde 2006 ha aumentado en 3 años y se ha acercado a los 69 años; las mujeres, que ahora se sienten mejor, se cuidan más, y ahora viven hasta los 75 años, cifra alcanzábamos antes", celebró Medvédev, que recordó que "estas cifras deben subir".

El reto de la modernización

Medvédev expresó seguridad de que Rusia va a crear nuevos proyectos globales como el centro de investigación Skólkovo a las afueras de Moscú, apodado el Silicon Valley ruso. "Estoy seguro de que Skólkovo será el ejemplo del primer proyecto exitoso de alcance mundial en la ciencia, la educación y la innovación en los últimos 30 años. Será el primero, pero estoy seguro de que no el último”, dijo Medvédev.

Según el mandatario ruso, el país ha alcanzado un alto nivel de investigaciones científicas y ha creado un sistema de instituciones para seguir el camino del progreso. Destacó asimismo la producción de sistemas computerizados de tecnología punta para las áreas espacial y de aviación, así como el proyecto de la nueva planta nuclear resistente a cualquier influencia extrema. Además, la mitad de las regiones rusas cuentan con el sistema de localización por satélite GLONASS.

Acerca de las tecnologías de redes, Medvédev recalcó que “ha aumentado dos veces el uso de Internet de banda ancha y el número de usuarios activos asciende a 50 millones de personas, la cifra más alta de Europa”.

Medvédev destacó otro logro: la introducción de la televisión digital y su rápido desarrollo. Así, el mandatario dijo que para el 2015 los ciudadanos tendrán acceso a más de 20 canales gratis de televisión digital.

La corrupción en el punto de mira

Dmitri Medvédev se ha comprometido seguir luchando contra la corrupción. El presidente recordó que bajo su dirección se está llevando a cabo un trabajo a gran escala en ese sentido, en el marco del cual Rusia se ha adherido a las convenciones internacionales en este ámbito y ha sido aprobada  la legislación necesaria.

El presidente propuso controlar los gastos de los funcionarios estatales y reiteró que es necesario imponer restricciones a las transacciones entre las estructuras del Estado y las compañías cuyos directivos sean familiares de funcionarios estatales. Medvédev también abogó por controlar los salarios de altos empleados si ellos gastan más de lo que ingresan.

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