EE. UU. elabora un plan para enfrentar amenazas contra sus bienes en el extranjero
El presidente norteamericano, Barack Obama, ha adoptado una nueva estrategia que califica la protección de bienes económicos estadounidenses, incluso en el extranjero, como un asunto de seguridad nacional.
Según un documento de la Casa Blanca, obtenido por la agencia de noticias AP, el Gobierno debe lidiar lo más temprano posible con las amenazas a los bienes económicos estadounidenses que dependen de los procesos de suministro global fuera del territorio del país.
Entre las fuentes de amenazas al suministro de “alimentos, medicinas, energía y mercancías que sostienen nuestra forma de vida”, se mencionan el terrorismo, el crimen organizado y los desastres naturales.
“Como nación debemos hacer frente los retos que representan estas amenazas y reforzar nuestra política nacional e internacional de la manera correspondiente”, reza el documento.
Además de los productos físicos y sistemas de transporte, la estrategia se concentra también en la seguridad de “las redes cibernéticas y de energía”.
Plazo fijado
La estrategia insta a las agencias federales y departamentos para que inmediatamente se fijen en “aquellos componentes de la red global de transporte, vías de suministro, activos e infraestructuras que son utilizados para llevar mercancías al consumidor final”.
También sugiere exhortar a que todos los socios comerciales de EE. UU. acepten lo que Obama llama “acuerdos para compartir información con el fin de aligerar los trámites gubernamentales y sincronizar pautas y procedimientos”.
Obama determinó el plazo de un año para que los organismos gubernamentales presenten informes sobre los resultados de esas medidas y formulen recomendaciones para el futuro.
Esa nueva política, llamada Estrategia Nacional para la Seguridad de la Cadena de Suministro Global, la debe anunciar este miércoles la secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano, durante su visita a Suiza.