Nuevo medicamento para niños enfermos del Mal de Chagas
Médicos brasileños han creado un nuevo medicamento que aumenta en un 90% la posibilidad de curar la peligrosa enfermedad Mal de Chagas a los menores infectados.
Se trata de una nueva dosis pediátrica del medicamento llamado benznidazol, que fue desarrollada por el Laboratorio Farmacéutico Público de Pernambuco (LAFEPE) con el apoyo de la Iniciativa Medicamentos para Enfermedades Olvidadas (DNDi).
La directora de la Organización Panamericana de la Salud, la doctora argentina Mirta Roses Periago, aseguró optimista que "a partir de este momento, la esperanza de una pronta curación para la infección del parásito que causa el mal de Chagas es una maravillosa realidad", según consigna IPS Noticias.
Hasta el momento, el medicamento estaba sólo disponible en tabletas de 100 miligramos para adultos y la adaptación casera de la dosis no era exacta, lo que perjudicaba las perspectivas del tratamiento en niños. En cambio, el medicamento llamado LAFEPE Benznidazol, en tabletas de 12,5 milígramos es fácil y seguro de usar y permitirá tratar exitosamente a recién nacidos y niños de hasta dos años de edad o con un peso de hasta 20 kilogramos.
El Mal de Chagas es una enfermedad crónica endémica de varios países latinoamericanos. Empezó siendo una enfermedad característica de zonas rurales y tropicales pobres de Argentina y Brasil, pero se fue extendiendo por toda la región hasta llegar a Norteamérica e incluso España.
Hoy, la Organización Mundial de la Salud la considera como una pandemia y estima que 100 millones de latinoamericanos están en riesgo de contraer el mortífero Mal de Chagas y que 50 mil más mueren cada año a causa de esta enfermedad.
El mal de Chagas es transmitido por un insecto llamado vinchuca, o chinche, que tras defecar en las picaduras que hace para chupar sangre, transmite el parásito Trypanosoma cruzi. Este insecto habita en los rincones poco aseados de las casa de zonas rurales tropicales, así que el principal método para combatir la enfermedad es la fumigación.
Sin embargo, el parásito se ha transmitido también mediante transfusiones de sangre; trasplantes de órganos; de madres infectadas a sus hijos; y por la inmigración de latinoamericanos infectados a otros países. El parásito ingresa al torrente sanguíneo y provoca un paulatino deterioro de los tejidos del corazón, colon e intestinos, que ocasiona discapacidad y lleva paulatinamente a la muerte.
Los expertos señalan que los niños son los más vulnerables a la infección y que la mayoría de los 14.000 menores que cada año nacen con el mal por transmisión materna.