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Rusia puede tener listo un avión de pasajeros supersónico dentro de 15 años
Un nuevo avión de pasajeros supersónico de producción rusa podría ser construido, ensayado y certificado para vuelos internacionales dentro de unos 15 años, según el director del mayor centro de investigación aeronáutica de Rusia.
El retorno de los aviones supersónicos en el sector de vuelos de pasajeros se debería a los logros científicos a la hora de disminuir los efectos del fenómeno de la explosión sónica que acompaña la superación de la velocidad del sonido, informa Itar Tass.
"Hoy en día existe un entendimiento sólido de cómo evitar esta onda de sonido, que puede parecer una explosión de un proyectil y se oye a distancias de hasta 15 kilómetros", afirma Serguéi Chernishev, el director del Instituto Central de Aerohidrodinámica ruso, el centro de investigación aeronáutica más importante del país. Chernishev es un prolífico académico que ha sido condecorado a nivel internacional por su trabajo en el área de la explosión sónica. En su opinión, la solución implicaría la creación de un nuevo tipo de aeronaves.
"Hay demanda de este tipo de aviones. Un empresario podría tardar dos o tres horas en viajar desde Tokio a Londres o Nueva York y por la noche volver a casa para estar con su familia", explica Chernishev. El mercado está listo para la compra de aviones hipersónicos, aunque cuesten más de 100 millones de dólares, opina el científico.
Por el momento el grupo de Chernishev elabora un proyecto de avión de pasajeros supersónico junto a especialistas europeos. Para el período inicial de investigación y desarrollo se necesitarán las inversiones del Gobierno, opina el académico, y luego las empresas privadas podrían unirse al proyecto. En cuanto a los plazos de realización, el científico estima que se se situaría en la década de 2030.
Hay una solución al problema del estampido sónico
Cuando una aeronave supera la barrera del sonido, empieza a producir una onda permanente de choque muy parecida al ruido de una explosión; de ahí el nombre de explosión sónica. Este es un factor importante para los aeropuertos de las ciudades más pobladas, ya que el ruido es capaz de alcanzar niveles muy considerables, lo que ha demostrado el uso de los aviones hipersónicos Concorde y Tu-144."Hoy en día existe un entendimiento sólido de cómo evitar esta onda de sonido, que puede parecer una explosión de un proyectil y se oye a distancias de hasta 15 kilómetros", afirma Serguéi Chernishev, el director del Instituto Central de Aerohidrodinámica ruso, el centro de investigación aeronáutica más importante del país. Chernishev es un prolífico académico que ha sido condecorado a nivel internacional por su trabajo en el área de la explosión sónica. En su opinión, la solución implicaría la creación de un nuevo tipo de aeronaves.
La carrera por los aviones hipersónicos se intensifica
Actualmente Japón, Australia, EE.UU. y varios países europeos desarrollan tecnologías supersónicas, recuerda el académico. Japón, por ser uno de los países más alejados de los centros mundiales, da prioridad a estas tecnologías y goza de un cierto avance, afirma el académico."Hay demanda de este tipo de aviones. Un empresario podría tardar dos o tres horas en viajar desde Tokio a Londres o Nueva York y por la noche volver a casa para estar con su familia", explica Chernishev. El mercado está listo para la compra de aviones hipersónicos, aunque cuesten más de 100 millones de dólares, opina el científico.
Por el momento el grupo de Chernishev elabora un proyecto de avión de pasajeros supersónico junto a especialistas europeos. Para el período inicial de investigación y desarrollo se necesitarán las inversiones del Gobierno, opina el académico, y luego las empresas privadas podrían unirse al proyecto. En cuanto a los plazos de realización, el científico estima que se se situaría en la década de 2030.
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