Rusia reflexiona para elegir presidente por sexta vez
Ya quedan pocas horas para que abran los primeros colegios en las elecciones presidenciales de Rusia de las que saldrá elegido el jefe del Estado para los próximos 6 años. Este sábado es el dia de reflexión, cuando la propaganda electoral está prohibida y los electores rusos deben decidir a quién darán su voto. Se trata de la sexta vez que los rusos eligen a su presidente desde 1991.
A estas elecciones concurren 5 candidatos: además del actual primer ministro, Vladímir Putin, que según los sondeos goza de una amplia ventaja sobre los demás, participan Guennadi Ziugánov, líder del Partido Comunista, Serguéi Mirónov, que encabeza el partido Rusia Justa, Vladímir Zhirinovski, del Partido Liberal-Demócrata, y el multimillonario Mijaíl Prójorov.
En numerosos países del mundo ya se ha registrado los votos anticipados de los ciudadanos rusos expatriados.
Esta campaña electoral ha resultado ser una de las más tensas en la historia del país, ya que estuvo marcada por las manifestaciones masivas, tanto de protesta como de apoyo al gobierno. Tras las elecciones parlamentarias del 4 de diciembre la oposición empezó a salir a las calles denunciando fraudes en el proceso de la votación.
Pese a todo, el primer ministro, Vladímir Putin, comentó este viernes que las protestas son un factor positivo en la vida política del país porque "crea la necesidad de pensar, de buscar soluciones y de comunicarse con la sociedad". "Creo que para Rusia es una muy buena experiencia”, declaró en una entrevista con directores de varios medios extranjeros.
Para esta cita electoral Putin ha ordenado equipar los colegios electorales con cámaras web para garantizar la transparencia de las comicios, aunque la oposición declara que no es suficiente.
Nuevas manifestaciones tendrán lugar inmediatamente después de las elecciones, el día 5, en muchas localidades rusas. La administración de la capital, por ejemplo, ya ha acordado que la oposición se reunirá en la céntrica plaza Púshkinskaya, mientras que en zonas aledañas al Kremlin, como la Plaza Manezh, se concentrarán los partidarios del gobierno.