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Renombran dos calles rusas en apoyo al grupo Pussy Riot
Una agrupación de jóvenes artistas de la ciudad rusa de Krasnoyarsk, que se encuentra en Siberia, organizaron un acto de apoyo a las integrantes del grupo ruso de música punk Pussy Riot, condenadas recientemente a dos años de prisión por “gamberrismo por motivos de odio y hostilidad religiosos”.
Los pintores siberianos pegaron varios carteles de papel que imitaban las placas con los nombres de las calles, pero en lugar de estos aparecían escritos los de las integrantes de Pussy Riot: Nadezhda Tolokónnikova, María Aliójina y Yekaterina Samutsévich.
Así dos calles de Krasnoyarsk, la 'del 9 de enero', y la 'de Surikov', se convirtieron durante varias horas en las calles 'de las Pussy Riot'. Los artistas eligieron precisamente estos lugares de manera intencionada, ya que en estas calles están situados dos de los principales templos religiosos de la ciudad.
Por el momento, ni las autoridades de la ciudad ni los representantes de la Iglesia Rusa Ortodoxa han comentado este acto.
En febrero de 2012 las integrantes de Pussy Riot interpretaron Un rezo anti Putin en una de las catedrales más emblemáticas de Rusia, la del Cristo Salvador de Moscú.
Las cantantes afirman que su acto ha sido una protesta política y no querían ofender los sentimientos religiosos de los creyentes.
El caso de Pussy Riot ha provocado una gran polémica, no solo dentro de Rusia, sino también a nivel internacional.
Así dos calles de Krasnoyarsk, la 'del 9 de enero', y la 'de Surikov', se convirtieron durante varias horas en las calles 'de las Pussy Riot'. Los artistas eligieron precisamente estos lugares de manera intencionada, ya que en estas calles están situados dos de los principales templos religiosos de la ciudad.
Por el momento, ni las autoridades de la ciudad ni los representantes de la Iglesia Rusa Ortodoxa han comentado este acto.
En febrero de 2012 las integrantes de Pussy Riot interpretaron Un rezo anti Putin en una de las catedrales más emblemáticas de Rusia, la del Cristo Salvador de Moscú.
Las cantantes afirman que su acto ha sido una protesta política y no querían ofender los sentimientos religiosos de los creyentes.
El caso de Pussy Riot ha provocado una gran polémica, no solo dentro de Rusia, sino también a nivel internacional.
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