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Médica bahreiní: "Abusaban de mí y me torturaban para extraer confesiones falsas"
Fatima Haji, una de los médicas bahreiníes que fue condenada a cinco años de cárcel -fue absuelta en junio de 2012-, contó a RT sobre las torturas físicas y psicológicas que experimentó cuando estaba bajo custodia policial.
La médica Fatima Haji cuenta que fue detenida en su casa, como algunos de sus 19 colegas, mientras otros doctores fueron arrestados en pleno quirófano. Ningún detenido pudo contactar con los abogados o sus familiares durante los interrogatorios y fueron obligados a firmar confesiones falsas, a ciegas, sin poder leer lo que firmaban, confiesa la mujer.
"Estas confesiones fueron obtenidas bajo tortura severa. Me refiero a tortura física y psicológica: no nos permitían dormir durante días y nos obligaban a estar todos los días. Nos privaban de comida y agua, apenas nos permitían ir al baño", recuerda Haji y agrega que fueron golpeados con palos, torturados con electroshock y acosados sexualmente para conseguir que firmaran confesiones falsas.
Decenas de médicos fueron detenidos durante las protestas antigubernamentales que estallaron a principios de 2011. Fueron declarados culpables de delitos como posesión de armas en hospitales e intento de derrocar a la monarquía. El Tribunal Militar del país reconoció sus delitos basándose en las confesiones obtenidas bajo severas torturas, sostienen los médicos.
Según Haji, le acusaron de robar 100 bolsas de sangre que dio a los manifestantes para que se la derramaran sobre sí mismos y hacer parecer como si hubieran sido asaltados por la Policía.
A principios de 2011 Bahréin, de mayoría chiita, fue escenario de continuas protestas populares para pedir reformas políticas que fueron reprimidas por la fuerza por la monarquía sunita gobernante.
"Estas confesiones fueron obtenidas bajo tortura severa. Me refiero a tortura física y psicológica: no nos permitían dormir durante días y nos obligaban a estar todos los días. Nos privaban de comida y agua, apenas nos permitían ir al baño", recuerda Haji y agrega que fueron golpeados con palos, torturados con electroshock y acosados sexualmente para conseguir que firmaran confesiones falsas.
Decenas de médicos fueron detenidos durante las protestas antigubernamentales que estallaron a principios de 2011. Fueron declarados culpables de delitos como posesión de armas en hospitales e intento de derrocar a la monarquía. El Tribunal Militar del país reconoció sus delitos basándose en las confesiones obtenidas bajo severas torturas, sostienen los médicos.
Según Haji, le acusaron de robar 100 bolsas de sangre que dio a los manifestantes para que se la derramaran sobre sí mismos y hacer parecer como si hubieran sido asaltados por la Policía.
A principios de 2011 Bahréin, de mayoría chiita, fue escenario de continuas protestas populares para pedir reformas políticas que fueron reprimidas por la fuerza por la monarquía sunita gobernante.
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