Irán conmemora la toma de la embajada de EE.UU. quemando banderas estadounidenses

La toma de la embajada estadounidense en Teherán el 4 de noviembre de 1979 y la consiguiente crisis de los rehenes, que se prolongó 444 días, hasta enero de 1981, fueron considerados como uno de los más grandes fiascos en política exterior de Washington.

El 4 de noviembre grupos de estudiantes iraníes, seguidores de la Revolución Islámica de Ruhollah Jomeini, rodearon la embajada en protesta por el intervencionismo estadounidense, y tomaron como rehenes a 66 diplomáticos y ciudadanos de EE.UU., que permanecieron durante 444 días en la sede diplomática.  

Este lunes, coincidiendo con el 34º aniversario del asalto, manifestantes se reunieron cerca del edificio donde hace más de tres décadas se encontraba la embajada, y procedieron a quemar banderas de EE.UU. mientras gritaban lemas antiestadounidenses como: "¡Muerte a Estados Unidos!".

Pese a que las movilizaciones antiestadounidenses se organizan anualmente en la capital de la República Islámica, esta manifestación pasa por ser una de las más importantes y multitudinarias de los últimos años, ya que los grupos conservadores utilizaron el aniversario para mostrar su rechazo a la política del 'deshielo' que preside actualmente las relaciones entre Washington y Teherán.