El canal internacional
de noticias en español
más visto en el mundo
Actualidad

La reforma migratoria, un posible 'dolor de cabeza' para Obama

Publicado:
El 20 de enero se cumple un año de la toma de posesión del presidente de Estados Unidos, Barack Obama. Los expertos analizan los resultados del primer año presidencial de Obama y, además, discuten los problemas de la reforma migratoria del nuevo presidente del país.
La reforma migratoria, un posible 'dolor de cabeza' para Obama

El 20 de enero se cumple un año de la toma de posesión del presidente de Estados Unidos, Barack Obama. Los expertos analizan los resultados del primer año presidencial de Obama y, además, discuten los problemas de la reforma migratoria del nuevo presidente del país.

Thomas Donohue, el presidente de la Cámara de Comercio de Estados Unidos (USCC), sostuvo que el empresariado del país está “listo y dispuesto” a apoyar la reforma migratoria junto con la Casa Blanca y el Congreso. Donohue indicó que ya está trabajando con el Gobierno del presidente Barack Obama en el diseño de una iniciativa de esta reforma.

“La USCC ha sido una importante partidaria de la inmigración. Estamos listos y dispuestos a sumarnos a la administración y el Congreso para hacer esto. No sé si estarán allí los sindicatos, pero estamos a favor de la reforma”, dijo.

Donohue reconoció que encontrar el balance exacto en una reforma migratoria es difícil porque se debe incluir el programa de trabajadores temporales y la legalización de 11 a 13 millones de indocumentados en momentos de alto desempleo. Asimismo, señaló que toda reforma debe incluir un sistema de visas para profesionistas altamente capacitados, protección fronteriza y mecanismos para acelerar la entrada a EE. UU. de quienes buscan emigrar de manera legal.

Donohue, quien también discrepa de los sindicatos en el asunto de la ratificación de los acuerdos comerciales pendientes con Colombia, Panamá y Corea del Sur, señaló por otra parte que los sindicatos no entienden la importancia del comercio para crear empleos. El acuerdo con Colombia es criticado por los sindicatos estadunidenses, mientras que en el caso de Panamá desean reformas en la legislación laboral y fiscal.

Aunque el Gobierno de Obama ha señalado que desea usar el libre comercio como una herramienta para la recuperación económica, Donohue señaló que ha visto “pocas señales de su voluntad de retar a los sindicatos, que básicamente les financiaron la elección”.

Después de un año desde que el primer hombre de raza negra asumiera el poder en EE. UU., una cosa parece clara: es el presidente más prohispano de la historia del país. Según cálculos de la agencia Associated Press, ningún presidente ha nombrado tantos altos cargos latinos en tan poco tiempo como Obama.

Después de aclarar el programa migratorio de Obama en la comunidad hispana, como se denomina a la mayor  minoría de EE. UU., todo parecía lleno de esperanzas. La afinidad del presidente con los hispanos se explica por “la transformación demográfica de Estados Unidos”, según Brent Wilkes, director ejecutivo de la Liga de Ciudadanos Latinos Americanos Unidos (LULAC).

A primera vista, Barack Obama tiene la administración con más latinos de toda la historia de ese país: los nombres más destacados son Sonia Sotomayor, la primera juez latina en el Tribunal Supremo y los miembros del Gabinete Hilda Solís, secretaria de Empleo, y Ken Salazar, secretario de Interior.

Además, el mandatario ha nombrado mayor cantidad de hispanos en puestos altos de su Gobierno que cualquiera de sus predecesores. En los primeros once meses de mandato, Obama ha nombrado a 49 hispanos para cargos que requieren la confirmación del Senado.

Por otra parte, paradójicamente, en el primer año de Barack Obama como presidente, se duplicó el número de arrestos y deportaciones de indocumentados en Estados Unidos.

Es verdad que los republicanos siempre han tenido “relaciónes complicadas” con los hispanos y la retórica antiinmigratória de los últimos años ha dañado mucho al imagen de este partido.

Ahora, para los legisladores del partido demócrata, al que pertenece Obama, el problema será si apoyar la nueva reforma de la inmigración y ganarse apoyos hispanos o rechazarla. En este último caso, los demócratas tienen riesgo de perder a un electorado clave.

En la campaña que llevó a Obama a la presidencia, a pie de calle y sostenida por un efectivo movimiento de base, los hispanos fueron decisivos y un 67% de este grupo le votaron.

El problema es que los cambios anunciados sólo hacen que ahora la reforma migratoria suponga un dolor de cabeza a largo plazo. Así, según la mayoría de los expertos políticos, la propuesta de esta reforma por parte del Gobierno no se ha materializado y todo el impulso generado  inicialmente por la discusión sobre este tema casi desapareció.

comentarios
RT en Español en vivo - TELEVISIÓN GRATIS 24/7