Ejecutivos españoles reciben las bonificaciones más altas en Europa
Los ejecutivos españoles reciberon remuneraciones récord en Europa, durante 2008-2009.
Según el diario estadounidense The Wall Street Journal, los directivos medios de las grandes compañías en España obtuvieron bonificaciones adicionales por 1.93 millones de euros (2.625 millones de dólares) por año.
La crisis financiera, los bajos índices del PIB y el alto nivel de desempleo en el país no fueron obstáculos para incrementar la fortuna de dichos directores.
Los gerentes italianos ocupan el segundo lugar en el volumen de dividendos obtenidos, que se estiman en 1.72 millones de euros (2.340 millones de dólares). El tercer puesto pertenece a los ejecutivos ingleses qye reciben bonificaciones valoradas en 1.31 millones de euros (1.782 millones de dólares).
Los países de la Península Escandinava tampoco se quedan atrás, otorgando a sus directivos compensaciones evaluadas en 850.000 euros por año (1.156 millones de dólares), sólo debajo de Francia, donde el índice asciende a 930.000 euros (1.265 millones de dólares).
En promedio, la gratificación que los funcionarios europeos alcanzaron en 2009 sumó 1.2 millones de euros (1.632 millones de dólares), coincidiendo con el salario anual.
Pero no todo es tan ideal en los estados europeos. El presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, fue blanco de las críticas por los mediocres resultados económicos de su gestión. España está inmersa en una recesión desde hace año y medio, la tasa de desempleo roza el 19%, con casi 4.5 millones de desocupados y el déficit público se ha triplicado hasta el 11.4% del PIB.
El jefe del gobierno español reconoció la gravedad de la crisis por la que atraviesa el país, pero pidió confianza en las recetas del gobierno socialista. Zapatero afirmó que la economía empezará a crecer en el primer semestre de 2010, pero admitió que no se crearán nuevos empleos hasta finales del año. El gobierno prevé una contracción económica del 0,3% este año.
"Crear empleos está permanentemente en nuestra cabeza, está detrás de cada medida que adoptamos", dijo.
Además, precisó que ha propuesto a sindicatos y empresarios consensuar una gran reforma del mercado laboral, que permita estimular la contratación y frenar la temporalidad de los trabajos.
Finalmente, ofreció un nuevo pacto a todos los grupos de la cámara para impulsar medidas económicas a largo plazo y diseñar un tejido productivo menos dependiente de la industria de la construcción.
Sin embargo, el líder del conservador Partido Popular, Mariano Rajoy, se mostró muy crítico con el gobierno y pidió a Zapatero una rectificación del rumbo.
El presidente del PP culpó a Zapatero del elevado número de desempleados y pidió un giro radical en materia económica. Para empezar, exigió al gobierno que retire el aumento al IVA (Impuesto al Valor Agregado) aprobada el año pasado y que entrará en vigor en julio.
"Lo que tiene que hacer es tener las ideas claras y ponerse a gobernar", dijo Rajoy. "Su credibilidad en esta materia está bajo mínimos".