El Papa exige respeto para con los derechos de los inmigrantes
El Papa Benedicto XVI exigió respeto para con los inmigrantes, calificándolos de "personas con derechos y deberes", después del rezo dominical desde el balcón del Palacio Apostólico en la Plaza de San Pedro y fue dirigido a los miles de fieles reunidos y así como a todos los cristianos en general.
Esta es la reacción del Pontífice ante la ola de disturbios en Rosarno, ciudad del sur de Italia, en donde los inmigrantes africanos protestaron contra los abusos de carácter racial. Según los últimos datos, los enfrentamientos dejaron un saldo de cerca de 70 personas heridas.
El sábado pasado las autoridades locales evacuaron a más de 300 trabajadores ilegales en autobuses escoltados por coches de la policía. Los trabajadores en general son procedentes de Ghana y Nigeria y fueron transportados a un centro temporal para inmigrantes ubicado fuera de Rosarno.
El Papa dijo en su discurso que "cada migrante es un ser humano” y que merece igual respeto por sus derechos y deberes sin dependencia de su origen, cultura, tradiciones. Agregó que a los inmigrantes hay que respetarlos “particularmente en el ámbito del trabajo, donde existe la tentación de explotarlos”.
La situación se complica ya que el mercado laboral de inmigrantes en el sur de Italia está controlado por la mafia local, una organización llamada "ndrangheta". Ahora el Gobierno italiano está investigando si esta organización está involucrada en incitar o provocar las tensiones durante los recientes disturbios.