La ONU está preocupada por la situación de los indígenas en Colombia
La crítica situación de los indígenas en Colombia se agrava de manera desproporcionada a causa del conflicto armado interno y no ha sido afrontada con la urgencia que merece la gravedad del asunto, según manifestó el relator especial de la ONU para los Pueblos Indígenas, James Anaya, en su informe sobre Colombia.
La decisión de los pueblos indígenas de no participar en el conflicto incluso ha derivado en un incremento de violencia y amenazas contra ellos. El impacto del conflicto es especialmente severo sobre las mujeres y niños indígenas, que están expuestos al reclutamiento y la violencia sexual por parte de los grupos armados ilegales, sobre todo de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Por otro lado, persisten las violaciones de derechos humanos por miembros de la Fuerza Pública y siguen sin ser resueltos varios casos con víctimas indígenas. Estos pueblos también han denunciado de manera reiterada la ocupación de sus escuelas, sitios sagrados y viviendas que hacen miembros del Ejército Nacional.
La erradicación de las plantaciones de coca con el método de fumigación aérea con glifosfato también afecta a los pueblos indígenas, acarreando problemas sanitarios y alimentarios, a pesar de que La Corte Constitucional ordenó la suspensión de las fumigaciones sin consulta previa con los indígenas.
En general, las leyes, programas y políticas del Gobierno colombiano no permiten una eficaz protección de los derechos humanos de los pueblos indígenas en el país, resumió el relator especial.
En octubre de 2009 James Anaya visitó varias regiones de Rusia: el distrito autónomo de Janti-Mansi en el centro de la Llanura de Siberia Occidental; el Krai de Krasnoyarsk, la segunda región más grande del país, situada en el medio de Siberia; y el Krai de Khabarovsk, en el Lejano Oriente. El experto de la ONU quedó impresionado por ciertas iniciativas a nivel federal y regional con las que se propone resolver los problemas de los pueblos poco numerosos, pero matizó que son apremiantes su consolidación y aplicación práctica.