Siguen siendo populares los matrimonios entre españoles y rusas

Anualmente se contraen más de mil matrimonios entre españoles y rusas, pero entre un 20% y un 30%  ellos se disuelve al poco tiempo, según informa la emisora Radio Svoboda.

La mayoría de las rusas se encuentra directamente con los españoles sin usar servicios intermediarios. Llegan al país para trabajar en el sector hotelero o como asistentas, pero con vistas a ser amas de casa. Se trata de mujeres de distintas edades, pero muchas tienen de 40 a 50 años y provienen de localidades remotas de las provincias rusas.

Lo que atrae a los españoles en estas mujeres en primer lugar es su físico. “Hay realmente mujeres muy bellas entre las rusas”, comenta la periodista española Rosa María Calaf, que durante muchos años fue corresponsal de Televisión Española en Moscú. “En cualquier caso se perciben muy diferentes de las españolas. Los hombres españoles tienen en la mente la imagen de una rubia esbelta con ojos azules, un estándar de la misteriosa y fascinante belleza septentrional”.

Pero muchos matrimonios fracasan pronto por razones de barrera lingüística, el rechazo al modo de vida español o diferencias en las costumbres y opiniones. Muchas mujeres rusas afrontan una sorpresa desagradable al descubrir el machismo característico de muchos españoles. Es precisamente la razón de que ellos opten por parejas de origen oriental, a las que se considera más dóciles. Los hombres españoles buscan en las rusas lo que eran hace unos treinta años las españolas, hogareñas y obedientes de su esposo, que controlaba todos los gastos dómesticos. Por supuesto, este rol no apetece a muchas rusas, de ahí las desilusiones y los divorcios.