Aparecen grafitis en la estatua del Cristo Redentor de Río de Janeiro

Grupos de vándalos pintaron grafitis sobre la estatua del Cristo Redentor de Río de Janeiro, símbolo de la ciudad y considerada como una de las siete nuevas maravillas del mundo.

Durante la noche, un grupo de desconocidos se introdujo clandestinamente en el lugar, subiendo por los andamios instalados para mantener el monumento que está en obras y escribieron en los brazos, en el pecho y en el rostro de la estatua diferentes frases de protesta. "Cuando los gatos salen los ratones se divierten", decía una y la otra "¿dónde está la ingeniera Patricia?", refiriendose al caso de la joven Patricia Franco, desaparecida en 2008. Las circunstancias del crimen no fueron esclarecidas, pero algunas fuentes atribuyeron el delito a policías.

El padre de la desaparecida repudió a los autores de las pintadas, diciendo, que “eso no es una protesta, es un acto de vandalismo”. El aclalde de la ciudad, Eduardo Paes, calificó de criminales a los “pintores” y dijo que este acto “lastima a la patria”. "Esos criminales pagarán por lo que han hecho. Irán a la cárcel", advirtió Paes. "Río de Janeiro y Brasil no se merecen esto", agregó. Además, ordenó que los grafitis fueran limpiados en un plazo de 48 horas.

Según señalaron en la alcaldía de la ciudad, es el primer acto de vandalismo que sufre la estatua desde el año 1931, cuando el monumento fue inaugurado.

En abril, la entrada al monumento se cerró para los grupos turísticos a causa de los corrimientos de tierra que han dejado hasta ahora 253 víctimas mortales. Además, se bloqueó la carretera que llega hasta el Cristo y la línea férrea del tren turístico que sube hasta la estatua.

El Cristo Redentor, de 38 metros de altura, se encuentra en la cima del monte Corcovado, a 700 mietros, y es visible desde casi todas las partes de la ciudad. En 2009 fue elegido como una de las siete maravillas del mundo y declarado patrimonio nacional.