Presidente hondureño visita EE. UU. en busca de confianza

El presidente de Honduras, Porfirio Lobo, visita Estados Unidos en su primer viaje oficial que busca restablecer las relaciones diplomáticas, enfriadas tras el golpe de estado de junio de 2009, con el que el legítimo presidente, Manuel Zelaya, fue derrocado y exiliado bajo amenazas de muerte.

En un evento auspiciado por la Universidad de Miami, el mandatario hondureño habló sobre los retos que su nación enfrenta tras el golpe de estado. En su discurso de apertura, Lobo recalcó que la democracia en Honduras fue reestablecida con su gobierno y que de ahora en adelante, la labor que queda es empezar a construir el futuro.

“Estamos trabajando, el tema de la delincuencia ha crecido muchísimo en los últimos cuatro años y estamos trabajando para darle seguridad a nuestro pueblo, la seguridad respecto de los derechos humanos es fundamental para nuestro pueblo.”

Ante estas declaraciones, varios medios de comunicación en Honduras denunciaron que las elecciones en las que Lobo salió victorioso fueron manipuladas por obra de Roberto Micheletti, que arrebató la silla presidencial a Zelaya con el golpe de estado de junio de 2009.

No todos estaban contentos con la visita de Lobo. Una inmigrante hondureña protestó afuera del hotel donde Lobo hablaba con académicos, diplomáticos y periodistas.

“Bueno, de los asesinatos de periodistas, Dios tiene el control y está buscando gente, mujeres y hombres valientes que se atrevan a desenmascarar a los corruptos políticos”, afirmó la mujer.

Lobo anunció que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, lo llamó por telefono para conversar, felicitándole por el proceso democrático en Honduras.

Pero en realidad, la Casa Blanca expresó en un comunicado que Obama  manifestó su preocupación por las violaciones de derechos humanos en Honduras, especialmente por el incremento de las operaciones de narcotraficantes y los asesinatos políticos de al menos seis periodistas opuestos al régimen de Micheletti y al gobierno de Lobo. El comunicado señala también que "estos últimos sucesos son sospechosos particularmente por tratarse de periodistas y activistas". Ante esto, Lobo anunció que las investigaciones continúan y que su gobierno hará todo lo posible para lograr resultados y evitar más muertes.

Todo parece indicar que el presidente hondureño continuará buscando acercamientos para mejorar la imagen del país y las relaciones económicas con Estados Unidos, pero como dicen, en el juego de la política, nada es predecible.