La Gran Guerra Patria nunca será una abstracción histórica para nosotros

¡Buenos días! Buenos días a todos, buenos días a los veteranos.

Sesenta y cinco años nos separan ya de la Gran Victoria. Durante estos años han crecido varias generaciones, pero para todos nosotros el 9 de mayo es un día especial, el día de nuestra enorme Victora. La Gran Guerra Patria nuncá será para nuestro pueblo una abstracción histórica, una fecha en las tarjetas postales o la que se identifica con las escenas bélicas en el cine.

Estoy en la ciudad de Volokolamsk. Las batallas más duras se produjeron aquí a finales del otoño de 1941 durante casi un mes. Parece que los alemanes se esforzaban por llegar a la capital. Decían con cinismo que acababan de desayunar en Volokolamsk y cenarían en Moscú. Pero cuando se estaban aproximando a la capital, se enfrentaron por primera vez en la guerra con una resistencia inusual y muy encarnizada. Todos conocen la hazaña de los héroes de Panfilovtsi, que libraron aquí su última batalla. Acabo de visitar su museo, que es pequeño, pero muy simpático. El enemigo fue repelido, fue detenido, aunque a un precio terrible e increíble. Después de las batallas en los alrededores de Moscú, nuestros soldados iniciaron la ofensiva. Y por todas las hazañas heróicas de estos luchadores, se ha otorgado por mi decreto el título de Ciudad de la Gloria Militar a la ciudad de Volokolamsk.

Hoy día funciona en Volokolamsk el club militar- patriótico Panfílovets, que se dedica a la búsqueda de los restos de los soldados caídos. He hablado con los chavales. ¡Bravo! Dedican su tiempo y esfuerzos para a la búsqueda de los soldados desaparecidos en combate y lo hacen de buena gana, no por dinero o fama.

Son los que deben convertirse en modelos de comportamiento. Es nuestro deber no sólo conocer el nombre de cada soldado caído, sino también enterrarlos a todos conforme a las tradiciones y con honores militares, como lo hacen en todo el mundo. En eso se plasma nuestra memoria de la guerra, de sus héroes. Quisiera dar las gracias a los visitantes del blog, a los que comparten conmigo los recuerdos de la historia militar de su familia, a los que siguen buscando las fosas de sus parientes, así como a los que simplemente ayudan a los veteranos tanto en los días comunes como en el día de la gran fiesta.

Quisiera dar las gracias a nuestros jóvenes compatriotas que viven en otros países, pero también cuidan de los veteranos. Este tipo de personas sí que existen y eso está muy bien.

Como ya he dicho en repetidas ocasiones, mi familia, como muchas otras en nuestro país, honra sagradamente la memoria de la guerra. Mi padre proviene de la región de Kursk. Esa región -así como las de Oriol, Briansk y toda la parte central de Rusia- se vio convulsionada por la guerra. Las batallas fueron muy crueles, muy terribles. Hubo retiradas, ofensivas, la situación cambiaba todo el tiempo. Según cuentan los testigos, en primavera, cuando se derretía la nieve, los campos agrícolas aparecían cubiertos de cadáveres. Fue un espectáculo horrible. Los viejos,  los jóvenes y los niños enterraban a los caídos, excavaban fosas comunes. Lamentablemente, las hay en casi todos los pueblos.

En la mayoría de ellos colocaron unos pequeños y discretos obeliscos, que se pueden ver en todo el país. Y es preciso conservar estas evidencias mudas y agudas de la Gran Guerra Patria.

Tal vez no sean tan grandiosos como los grandes monumentos, pero no son menos conmovedores. Mi abuelo Afanásiy Fyódorivh Medvédev, se alistó como voluntario en 1941, luchó cerca de Novorosiysk, en Málaya Zemlya. Cuando hablaba de eso, siempre se le saltaban las lágrimas a los ojos, lo revivía cada vez. Se dice que su casa, como muchas otras en la aldea de Mansurovo, donde había nacido, fue incendiada por los alemanes en el periodo final de la guerra.

Y otro abuelo mío, Veniamín Serguéevich Sháposhnikov, estaba combatiendo también en aquel periodo cuando mi madre y mi abuela se encontraban evacuadas en Tayikistán. La misma situación la estaban viviendo muchas personas, casi todos los habitantes de nuestro país: nuestros abuelos y nuestros padres estaban luchando en el frente y las mujeres se encontraban en la retaguardia, vivían desplazadas, ayudando a los del frente.

En vísperas del 9 de mayo miles de personas se felicitan y felicitan a los veteranos con motivo de la Victoria en la Gran Guerra Patria. También lo hacen a través de Internet y los mensajes sobre la guerra que aparecen en la red me parecen muy sinceros, muy penetrantes, llenos de luz. No son mensajes que se cuelgan en las páginas personales o en las redes sociales para atraer la atención sobre sí mismos, para destacar (no tengo nada en contra de eso), sino que en este caso se trata de un sentimiento especial de la persona que escribe sobre el tema.  Sin duda, todo esto nos une mucho.

El 6 de mayo empezó a funcionar la web 'Crónica de la Victoria del 1941-1945' en www.pobeda-info.ru. La página fue creada por iniciativa del Ministerio de Comunicaciones. Revisé la página y me gustó su funcionamiento. Es la primera vez que en el marco de una sola página web están recogidas las copias digitales de los documentos de archivo y publicaciones periódicas. Encontré allí cosas muy interesante, como por ejemplo una grabación del Desfile de la Victoria de 1945 realizada en una película en color alemana que se había conseguido como trofeo de guerra. ¡La calidad es perfecta! Siempre solíamos ver estas tomas históricas en blanco y negro. Gracias a este recurso de información se puede encontrar muchos otros materiales de archivo, documentos, grabaciones, ya que para la creación de esta página se usaron los fondos de los mayores archivos nacionales e internacionales. Lo más importante es que este servicio es rápido y fácil de usar y da acceso a los documentos históricos auténticos, lo que garantiza que las futuras generaciones de nuestros ciudadanos tengan información verídica sobre la guerra. En la web hay copias de muchas publicaciones periódicas, tales como Izvestiya (Noticias) o Krasnaya Zvezda (la Estrella Roja) entre otras. Creo que es un servicio informativo muy útil para todos aquellos que quieran familiarizarse con la página.

Cada año celebramos nuestra Fiesta de la Victoria con un desfile militar en la Plaza Roja, es una tradición. Este año el desfile también se celebrará, pero de acuerdo con un guión especial: comenzará simultáneamente en todas las partes de nuestro enorme país. Por primera vez por la Plaza Roja desfilarán, junto con los sucesores de los vencedores, los oficiales de los países de la Comunidad de Estados Independientes, que son como nuestros familiares, y los soldados de los países aliados que, junto con nosotros, luchaban contra el fascismo. Creo que este desfile es un símbolo de nuestra Victoria y al mismo tiempo es una señal de respeto a la hazaña de los libertadores a los que nunca olvidaremos. Todo lo que vemos a nuestro alrededor, todo lo que admiramos, todo lo que queremos, lo más valioso que tenemos, toda la vida de las generaciones de la postguerra, se lo debemos nuestros antecesores, al hecho de que salieran vivos de la lucha encarnizada contra el enemigo, de que lo vencieran. El resultado de la Gran Guerra Patria somos nosotros mismos, nuestro futuro y el futuro de nuestros hijos.