Sangrientos ataques de sicarios dejan más de 50 muertos en México
La ola de violencia que invadió México este fin de semana cobró la vida de más de 50 personas.
La última masacre fue cometida la noche del sábado cuando un grupo de desconocidos atacó a gente que celebraba una fiesta en la ciudad de Torreón, Coahuila, fronterizo con EE. UU. El ataque dejó 17 muertos y 12 personas resultaron heridas.
Según la policía local, el delito fue realizado a la manera típica de los criminales relacionados con los cárteles de drogas. Los sicarios penetraron en una Quinta donde tenía lugar el festejo y abrieron fuego contra los huéspedes. "Un comando fuertemente armado llegó y gritaron 'mátenlos a todos' y empezaron a disparar", informó un fuente de la policía estatal, citando testimonios de algunos de los sobrevivientes.
Anteriormente se sabe de otro homicidio masivo también cometido en el norte de México. Esta vez distintos hechos de violencia dejaron al menos 15 personas muertas en el estado de Chihuahua, durante la noche del viernes.
El viernes otras 12 personas más murieron en enfrentamientos armados entre militares y miembros de los cárteles de las drogas en la ciudad de Nuevo Laredo, Tamaulipas,en el noroeste de México.
Tras subir al poder en 2006, el presidente mexicano Felipe Calderón declaró la guerra contra el crimen organizado y los narcotraficantes. Se vió obligado a desplegar el Ejército para participar en esta lucha, un paso que fue provocado por la corrupción de la policía. Sin embargo, a pesar de todas las medidas, la situación todavía no ha mejorado.
De acuerdo con los datos de las autoridades, el número de muertos en México atribuidos al crimen organizado alcanzó los 7,048, con lo que suman un total de 24,826 desde diciembre del 2006. En este plazo las fuerzas de seguridad lograron decomisar unas 75,000 armas, en su mayoría provenientes de Estados Unidos.