Moscú: “El dictamen de la CIJ de la ONU no avala a Kosovo como Estado”
Así lo comunicó el representante permanente de Rusia ante la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE), Anvar Azimov, en una reunión del Consejo Permanente de este organismo internacional.
Según el diplomático ruso, la decisión de la Corte Internacional de la ONU en La Haya (CIJ), que reconoció la legalidad de la declaración de la independencia de Kosovo, no puede interpretarse como permiso de que se constituya como Estado soberano.
El presidente de la Corte Internacional de Justicia Hisashi Owada (Japón) el 22 de julio en la sesión abierta en La Haya leyó el dictamen consultivo en que se confirmaba que la declaración de independencia del enclave en febrero de 2008 no viola las normas del derecho internacional. A diferencia de los fallos judiciales de la CIJ, sus dictámenes consultivos no son jurídicamente vinculantes, aunque pueden implicar consecuencias políticas.
“Las conclusiones de la CIJ de La Haya no pueden servir de justificación para que Kosovo se erija en Estado soberano, mientras que el problema del estatus internacional de la región permanece sin respuesta”, anunció Azimov.
El representante ruso añadió que la Corte no ha dado su aprobación a la secesión kosovar, sino se ha pronunciado exclusivamente sobre la legalidad de que el pueblo albanokosovar declare su independencia. Puntualizó que la CIJ en ningún momento haya dado su visto bueno a la secesión unilateral de dicho territorio, siendo ésta parte de Serbia. De esta forma la posición de Rusia sobre el no reconocimiento de la independencia se mantiene inalterable.
Al mismo tiempo Rusia apoya la necesidad de arreglar de manera definitiva el problema político kosovar con el fin de elaborar una decisión jurídica correcta y justa. Apoyados por Estados Unidos y una serie de países europeos, las autoridades albanesas del lugar, declararon unilateralmente el 17 de febrero de 2008 la independencia de esta región serbia.
La independencia es reconocida actualmente por tan sólo 69 de los 192 países-miembros de la ONU. Entre los adversarios de la soberanía albanokosovar figuran Rusia, China, India, España y otras potencias influyentes, que consideran que esta declaración es una violación grave de las normas del derecho internacional.