Cleveland llega a un acuerdo con el Departamento de Justicia sobre las prácticas policiales ilegales
Para Cleveland, un acuerdo con el Departamento de Justicia de EE.UU. es una posibilidad de evitar una larga y costosa batalla legal y permitiría asimismo a las autoridades demostrar que están trabajando para cambiar la situación. El alcalde Frank Jackson ya se enfrenta a una petición de dimisión por parte de los activistas de la ciudad, que insisten en que no ha hecho lo suficiente para evitar los abusos de la Policía, informa 'New York Times'.
Todavía no se sabe exactamente los puntos claves del acuerdo. No obstante, hay que tener en cuenta la experiencia de los últimos años: el Departamento de Justicia suele llamar a los cuerpos locales de Policía a revisar su política del uso de la fuerza. Además, habitualmente el Departamento permite que observadores independientes supervisen los cambios en los departamentos de Policía. Y las decisiones sobre qué cambios son necesarios son respaldados por órdenes de la corte.
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Según los resultados de la investigación del Departamento de Justicia, la Policía de Cleveland practicó con frecuencia el uso excesivo de la fuerza. Lo demuestra entre otros ejemplos el caso de Tamir Rice, un niño de 12 años muerto a tiros por un agente simplemente por tener en las manos una pistola de plástico.
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El pasado domingo la Policía de Cleveland detuvo a 71 manifestantes que expresaban su descontento por el veredicto de absolución del agente Michael Brelo, que en 2012 fue acusado de asesinar a dos ciudadanos afroamericanos desarmados. Después de los arrestos, las decenas de manifestantes comparecieron este lunes ante el tribunal por cargos de delito menor. Algunos todavía llevaban camisetas con mensajes como "No puedo respirar", en referencia a Eric Garner, que murió después de ser estrangulado por policías en Staten Island el año pasado.