El presidente ecuatoriano busca a los responsables del golpe de estado
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, continúa buscando a los responsables por la insurrección policial de la semana pasada. 58 uniformados ya han sido detenidos por su presunta participación en el golpe.
Correa también presentará una acusación por intento de asesinato. El presidente afirmó que a lo largo de su retención de unas 10 horas en un hospital, los sublevados iban a llevar a cabo un 'plano B': asesinarle. La identificación de los responsables se realizará tras analizarse las grabaciones de una radio patrulla de la Policía Nacional en las que se habla de acabar con la vida del mandatario.
El líder ecuatoriano acusó nuevamente al ex presidente del país Lucio Gutiérrez y a su grupo político de instigar a los policías a la rebelión y agregó que dentro de las fuerzas de seguridad se está creando el Grupo Armado Policial, que busca manipular y conspirar. Correa declaró que los grupos de oposición del país son financiados por las organizaciones de extrema derecha estadounidenses.
Por su parte, el presidente de EE. UU., Barack Obama, expresó su apoyo al presidente de Ecuador y a las instituciones democráticas del país, subrayando que todos los conflictos en aquel Estado tienen que ser resueltos de acuerdo con su Constitución y democráticamente.
Las protestas de los militares y policías fueron el resultado de la eliminación de una serie de beneficios salariales para los uniformados. Ahora Ecuador se encuentra todavía en estado de excepción.