Benedicto XVI inaugura el primer Sínodo de Obispos de Oriente Próximo
Benedicto XVI inauguró el 10 de octubre el primer Sínodo de Obispos de Oriente Próximo en la historia de la Iglesia. En la misa festiva de inauguración, el pontífice llamó a los líderes del islam, el cristianismo y el judaísmo -hoy en situación crítica debido a las guerras, la violencia o la falta de libertad religiosa- a que favorezcan "la paz y la justicia, sin que sea imposible el desarrollo armónico de todos los habitantes de la zona".
Con motivo de la Asamblea Especial del Sínodo, que durará hasta el 24 de octubre, en el Vaticano se reunieron por vez primera 185 obispos católicos, de los que 101 son de Oriente Próximo, y los patriarcas de las iglesias orientales. También fueron invitados el consejero político del mufti del Líbano, Mohammed Al Sammak, el ayatolá iraní, Seyed Mostafa Mohaghegh Ahmadabadi, y el rabino David Rosen, presidente del Comité Internacional Judío de Cuestiones Interreligiosas.
El tema central del Sínodo es la complicada situación de seis de los veinte millones de católicos que viven en los lugares vinculados directamente con el Antiguo y el Nuevo Testamento, desde Turquía hasta Irán.
Benedicto XVI empezó el sermón dando gracias "al Señor de la historia porque, a pesar de las frecuentes situaciones difíciles y atormentadas, la presencia de los cristianos en Oriente Medio se ha mantenido ininterrumpida desde los tiempos de Jesús hasta nuestros días".
El Papa precisó que los cristianos suelen ser las víctimas de los conflictos en la zona y deben tener "una vida digna en su patria, derecho principal de cada persona". Subrayó la necesidad de prestarles ayuda y soporte, mientras que llamó a los mismos cristianos a una comunicación más estrecha. Además, el Pontífice se dirigió a los líderes de las tres religiones, para pedirles "excluir la violencia" y "promover los valores culturales y espirituales que reúnen a la gente".
La misa festiva se celebró en la Catedral de San Pedro. La liturgia fue en el latín y griego, y se pronunciaron oraciones en inglés, turco, hebreo y parsi.