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El programa submarino de EE.UU. "pierde brillo"

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Los astilleros estadounidenses apenas pueden mantener el ritmo de construcción de submarinos.
El programa submarino de EE.UU. "pierde brillo"

El programa de construcción de submarinos clase Virginia de la Armada de EE.UU., considerado desde hace tiempo como "modélico" porque reduce rutinariamente el tiempo y el costo de construcción con cada sumergible, "está perdiendo parte de su brillo", según revela el portal Defense News.

Según la publicación, los problemas del programa se pusieron de manifiesto el pasado 2 de marzo, poco después de que el submarino Washington iniciara sus ensayos en el mar frente a la costa de Virginia. El nuevo submarino, que sobrepasó la fecha de entrega del contrato, "retrocedió aún más" cuando los ensayos en mar fueron detenidos y el sumergible tuvo que volver a puerto.

Michael Jabaley, el almirante de la Armada de EE.UU. que se encontraba a bordo del Washington durante las pruebas, no especificó el origen del problema que causó la decisión de cancelarlas. "Estamos trabajando en este asunto y la fecha de entrega y puesta en servicio de Washington está siendo revisada como resultado", agregó.

Entregas tardías y problemas de calidad

El portal recuerda que no es la primera vez que un submarino de clase Virginia rebasa una fecha de entrega fijada en el contrato, y destaca dos factores principales como posibles causantes de los problemas que afectan a todo el programa:

  • La decisión en 2011 de duplicar la tasa de construcción anual de submarinos de uno a dos;
  • La reducción sucesiva de los plazos de construcción.

La decisión de aumentar el número de submarinos construidos cada año puso en apuros a los astilleros y las empresas industriales que suministran partes para los sumergibles, que tuvieron que contratar a más trabajadores, "inyectando un nivel de inexperiencia" en sus fuerzas de trabajo. En resultado, las entregas tardías y los problemas de calidad se han vuelto más frecuentes, resalta el artículo.

Competidores rusos

El último submarino de clase Virginia que se incorporó a la Armada de EE.UU. fue el Illinois, con un presupuesto de casi 3.000 millones de dólares.

En comparación, los sumergibles rusos de ataque del proyecto 855 clase Yasen cuestan casi la mitad, mientras que superan al submarino estadounidense en muchos aspectos técnicos y tácticos, como la profundidad, la autonomía o la potencia de sus armas, señala al portal Gazeta.ru el experto del Centro de Análisis de Estrategias y Tecnologías, Konstantín Makienko.

Aunque los Illinois se consideran más silenciosos, los expertos apuntan que los submarinos rusos de cuarta generación de proyecto 885 tienen un nivel de ruido equiparable.

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