Condenan a muerte a un español en Tailandia por descuartizar a un empresario
El cuerpo del empresario español David Bernat fue encontrado descuartizado el pasado 30 de enero en el río Chao Praya de Bangkok. Llevaba 10 días desaparecido. Además una gran cantidad de dinero de sus cuentas había sido sustraído y enviado de forma encriptada a otras.
Inmediatamente apareció un sospechoso: Artur Segarra, otro español que huyó de su país acusado de realizar estafas. Según 'The Nation', la policía tailandesa dio con videos de distintos cajeros automáticos donde el barcelonés retiraba dinero de las cuentas de Bernat. La aparición de su moto abandonada en la frontera con Camboya incrementó las sospechas.
Segarra fue capturado en Sihanoukville, una ciudad costera camboyana. De allí fue trasladado nuevamente a Tailandia, donde finalmente fue sentenciado a muerte este 21 de abril.
Los motivos del crimen
Según se pudo conocer tras la aparición del cuerpo, Bernat fue torturado durante al menos seis días antes de ser descuartizado. Además, durante ese período de tiempo tampoco se lo alimentó ni se le dio de beber.
La hipótesis de los investigadores es que la tortura se llevó a cabo con el objetivo de que revelara sus cuentas bancarias para luego transferir su dinero. Bernat, de 39 años, era un consultor informático que ganaba 1.500 euros al día y vivía en Teherán, pero tenía un departamento en Bangkok.
No actuó solo
El escritor Joaquín Campos, otro español que vive en Camboya, se ha convertido en una figura clave para la investigación. Al enterarse de la detención de Segarra fue a entrevistarlo a la comisaría antes de que fuera devuelto a Tailandia. A partir de allí comenzó un trabajo que concluyó en el libro titulado 'La verdad sobre el caso Segarra'.
En diálogo con 'El Confidencial' Campos opinó que "es imposible" que Segarra no haya actuado solo. En primer lugar porque no sabe encriptar cuentas bancarias pero además porque hay serias sospechas sobre su capacidad para cometer un asesinato así. "Yo no imagino a Arturo descuartizando", afirmó Campos.
Una opción es que haya contratado sicarios, pero lo que al escritor más le preocupa es quién fue el ideólogo del crimen. "Todas las personas a las que entrevisto me hablan de una persona que se llama David Donoso", reveló. A medida que fue investigando se dio cuenta de que "este tipo en público decía que no conocía a Artur Segarra, pero eran amigos íntimos", explicó. "Tanto que le dejaba dinero", añadió.