La huella rusa del legendario Dino De Laurentiis
Dino de Laurentiis, de quien el mundo se despide en estos días, es conocido muy bien por los amantes de distintos tipos de cine, desde el neorrealismo italiano hasta los clásicos de los blockbusters de Hollywood y el cine ruso.
El legendario productor de cine, fallecido el pasado 10 de noviembre, fue uno de los primeros que inició la co-producción entre la URSS y el Este. Tras el éxito mundial de ‘Guerra y Paz’, Laurentiis propuso a su creador, Serguéi Bondarchuk, una idea que resultó en 1970 en la película ‘Waterloo’, basada en la historia de la lucha del ejército de Napoleón y su consecuente derrumbe. El protagonista fue el actor estadounidense Rodney Steiger, frecuente intérprete de dictadores y 'malos'.
El gran presupuesto, la música del famoso Nino Rota, las escenas de batalla de gran escala no son equiparales a ninguna por su valor y calidad cinematográficos.
“Se puede decir mucho sobre los beneficios de esta película, pero más vale destacar simplemente que es la mejor obra de batallas en la historia. Los presupuestos crecientes de las películas, las capacidades de los ordenadores no lograron acercarse a la obra de Bondarchuk. Sean las escenas de ‘Troya’, ‘300’, ‘Alejandro’ y su dramatismo, es imposible comparar con el verdadero éxito de Bondarchuk”, destacó uno de los cinéfilos del foro del portal Kinopoisk.
Claro que las obras de gran escala no eran sorpresa para el cine extranjero (ya existía ‘Lo que el viento se llevó’, los ’10 Mandamientos’ etc.), pero ‘Guerra y Paz’ y ‘Waterloo’ no sólo superaron al resto por la cantidad de gente usada en las películas, sino también por el nuevo sentido. Los historiadores destacan que las batallas estaban entrelazadas con una concepción general de la identidad de la nación, por ejemplo, en el caso de ‘Guerra y Paz’.
En la misma época las pantallas rusas mostraron cinco películas de crónica histórica sobre la Gran Guerra Patria, tales como ‘Liberación’, del cineasta Yuri Ozerov. Laurentiis participó en la producción de las cinco cintas.
En 1974 llegó a Moscú para coproducir la comedia ‘Las increíbles aventuras de los italianos en Rusia’, del director Eldar Riazánov. Dino de Laurentiis fue el primero en reconocer la película ‘El Sol blanco del desierto’. La compró de la compañía de producción soviética Goskino y la vendió muy beneficiosamente a EE. UU. Después de él, más 130 países hicieron lo mismo.
En su lista de como 150 obras, aparecen los cineastas más destacados e importantes de la esfera. De Laurentiis trabajó con directores como Federico Fellini (‘La Strada’ y ‘Las noches de Cabiria’), Luchino Visconti (‘El extranjero’), Pier Paolo Pasolini (‘Las brujas’), Ingmar Bergman (‘El huevo de la serpiente’), Jean-Luc Godard (‘Pierrot, el loco’), Roger Vadim (‘Barbarella’) y Milos Forman (‘Ragtime’).
Al pasar por EE. UU., Laurentiis produjo famosas obras como ‘Tres días del cóndor’ de Sydney Pollack, el remake de King Kong dirigido por John Guillermin, ‘El Bounty’ de Roger Donaldson y ‘Hannibal’ de Ridley Scott, entre otras.