El canal internacional
de noticias en español
más visto en el mundo
Opinión

El señor de las drogas

Publicado:
El señor de las drogas

Karzai siempre ha tenido muchas ganas de “tocar a EE. UU. como un violín”. Continuará descaradamente tratando al Tío Sam como a un viejo y adinerado amante de una joven; eso mientras la Casa Blanca tenga el coraje de guardar honestamente éste, el mayor secreto suyo.

Actualmente, la administración estadounidense se ve obligada a enfrentar las consecuencias y debe hacerlo rápidamente; debe hacerlo entre su rotunda derrota en las elecciones al Congreso y la pendiente revisión de su estrategia en Afganistán y Pakistán en diciembre; eso, si quiere evitar otra debacle, está vez en Afganistán.

La resaca después del traspaso de poder

Sin quererlo, el actual Comandante en Jefe ha aprobado no sólo la permanencia en su cargo al actual jefe del Pentágono, sino también la de la predilección de su antecesor por sustituir políticas acordadas por políticas personales, sobre todo en lo referente a Pakistán y Afganistán.

¿Recuerdan quién era el “aliado más indispensable” de Estados Unidos? Es verdad, el general Musharraf. La Administración de Bush le apoyó hasta el último día sólo para cosechar los “beneficios” de sentimientos antinorteamericanos, sin precedentes en Pakistán. Lo mismo con Karzai respecto a un inevitable “desenlace” de su gobierno.

La diferencia entre ambos personajes arriba mencionados es abismante pero, de alguna manera, ha escapado de los “expertos” de la política afgana de Obama: la de un subalterno expatriado importado contra un general nativo que ha madurado en el seno de su nación; la de un títere de amapola contra un benévolo dictador y, finalmente, la de un astuto y caprichoso estafador contra un franco y dogmático líder de la nación.

Obviamente, Karzai no se equipara a Musharraf pero, con dificultades, sin lugar a dudas políticamente ha durado más y le ha superado en el arte de chantajear a los inquilinos de la Casa Blanca.

A pesar de sus descarados intentos de alardear, engañar y chantajear a sus tutores políticos en Washington, Karzai Kabuli no se ha hecho “indispensable” ni “aliado” para nadie, jamás, ni en ningún momento.

Este individuo —como dirían los federales— ha engañado a sus cuidadores de Langley al “venderles” en el mercado afgano donde, como se sabe, no operan personas del tipo “Madre Teresa”. “Aunque es un bastardo, es un bastardo de los Estados Unidos” y, como es uno del tipo intocable, merece inmunidad y protección a toda prueba, por toda la vida, contra todo tipo de investigaciones criminales.

Un hecho que no ha notado Wikileaks es que la así llamada estrategia estadounidense [ausente] en Afganistán ha sido convertida en la estrategia de Karzai en y contra los Estados Unidos.

Así fue cerrado este desagradable acuerdo con el diablo: importación de la democracia estadounidense a cambio de la exportación de drogas afganas.

De cualquier forma que se le llame a este acuerdo —Drogas por Democracia o Democracia por Drogas— usted ya se ha formado la idea y, como sea, la cosa es fea.

Lo que el Departamento de Estado norteamericano llama visión 3D, Defensa, Democracia y Desarrollo, en el lenguaje de la CIA significa Destrucción, Democracia y Drogas.

¡Larga vida al Señor de las Drogas, ¡el Intocable!

Las declaraciones y opiniones expresadas en este artículo son de exclusiva responsabilidad de su autor y no representan necesariamente el punto de vista de RT.

RT en Español en vivo - TELEVISIÓN GRATIS 24/7