Las tres amenazas que se ciernen tras la victoria sobre el Estado Islámico
Con Mosul recapturado y con gran parte del casco antiguo de Raqa en manos de las Fuerzas Democráticas Sirias (FSD) –respaldadas por la coalición liderada por EE.UU.-, es probable que el Estado Islámico pronto sea borrado de los mapas de las zonas de guerra, informa Bloomberg.
Sin embargo, aunque la organización yihadista no ostente territorios, estará presente en otras formas: las mentes de los luchadores extranjeros que regresen a sus países de origen, la presencia en la Red y "las almas de las descontentas poblaciones sunitas" que quedan en las áreas que el grupo terrorista ha ocupado durante años.
Los yihadistas vuelven a casa
En el 2016, Daniel Byman, de la Universidad de Georgetown (Washington D.C., EE.UU.) afirmó que 1 de cada 20 terroristas regresan a sus países occidentales para luchar por la causa islamista. Sin embargo, indica que la amenaza del repatriado está sobrevalorada: algunos van a otras guerras de Oriente Medio, otros son interceptados por los servicios de inteligencia y a otros les resulta difícil, "e incluso humillante" aplicar las habilidades aprendidas en la guerra civil a la planificación de ataques contra civiles.
Asimismo, Byman destaca que la principal razón por la cual la mayoría no continuará su yihad es la psicológica. Según él, muchos combatientes extranjeros comenzaron a luchar por "defender al pueblo sirio" como motivación, para "jactarse" entre sus amigos o para buscar "emoción y aventura". Sin embargo, librar la lucha entre ciudadanos pacíficos es un paso bastante "dudoso". A ello se le suma que muchos volverán decepcionados debido a que la propaganda del EI no se correspondió con la realidad.
Propaganda en la Red
La agencia destaca que aunque realizar campañas de reclutamiento en Internet es relativamente barato, ahora el grupo terrorista "tendrá problemas con el mensaje". "El sueño de un Estado real era una herramienta de propaganda eficaz durante un tiempo y también lo fue el ruido de las primeras victorias. Ahora todo eso está en el pasado y los canales de propaganda deben promover la agotada idea de la venganza", apunta.
"Pronto, el EI será solo otro grupo terrorista compitiendo por la atención enojada de los potenciales reclutas. La derrota es difícil de vender, como ha descubierto Al Qaeda durante largos años", añade.
El pueblo sunita
La situación de los árabes sunitas en las zonas de Irak y Siria que están siendo liberadas actualmente "es la más difícil de hacer frente", ya que el EI no podría haber controlado estas tierras durante tanto tiempo sin el apoyo local. Alcanzar "un acuerdo político" es realista, pero tomará tiempo y es probable que vivan peor una vez que el grupo yihadista haya desaparecido del lugar.
La agencia apunta que los lugareños "temen" que el gobierno chiita de Irak intensifique la represión o que aplique un castigo colectivo. "Debe haber una alternativa mejor para los locales que una nueva insurgencia, y ese es el mayor desafío en Mosul y, pronto, en Raqa", concluye.