Una pareja demanda al equipo de fútbol por unos fans borrachos

Rebecca y Curtis Dunn, ambos estadounidenses, llevan a los tribunales al equipo de fútbol americano Cincinatti Bengals, la administración de su estadio y los vendedores de cerveza, acusándoles de negligencia. Quieren demostrar que son culpables de la lesión de Rebecca, sufrida durante el partido de 2009 al caer sobre ella dos seguidores borrachos que le rompieron la nariz y un dedo. Su argumento principal consiste en que las autoridades continuaron vendiendo cerveza a los hombres que ya estaban “notablemente intoxicados”.

La compensación material de su demanda no es conocida, pero obviamente debe superar el dinero invertido para tratamiento, a lo que, según la pareja, por el momento gastaron unos 20.000 dólares. Tuvieron que pagar tanto ya que Rebecca tuvo que utilizar cirugía plástica para corregir la imagen de su nariz lesionada. Los Dunn también demandan a los dos hinchas identificados simplemente como John Doe y John Doe II. “Como el resultado directo e inmediato de su intoxicación, perdieron el control y cayeron”, cuenta la demanda, produciendo “las lesiones catastróficas”.

También indica, que durante el incidente se rompieron unas gafas del sol cuyo valor es 700 dólares y que después las víctimas pasaron una noche en el hotel, porque el garaje del estadio ya había sido cerrado antes de que llegaran a recoger su coche.

El abogado Joshua D. Kelner mencionó también que los equipos tienen obligación de organizar el control de los aficionados, y que los vendedores de alcohol también pueden ser parcialmente responsables para las acciones de la gente borracha.