Los militares bolivianos venden pan

El ejército de Bolivia ha empezado a producir y vender pan a la población civil. Esta medida se tomó a propuesta del presidente boliviano, Evo Morales, para evitar la escasez y el alza de precios de este importante producto básico.

Los problemas empezaron después de que el pasado fin de semana Morales dectretara la retirada de las subvenciones a la importanción de combustibles. El llamado “gasolinazo” se reflectó en las tarifas de  los transportes y afectó también al sector de la alimentación.

Los panaderos amenazaron con vender más caro el pan y anunciaron un paro de 48 horas, una medida de protesta que el mandatario boliviano criticó diciendo que sector quiere aprovecharse de la situación.

Para apoyar a la población, que resultó la parte más afectada, el jefe de Estado ordenó al Ejército producir pan y venderlo al precio de uno 0,5 dólares en doce localidades del país, entre ellas la capital, La Paz, y la ciudad fronteriza de El Alto. Para alcanzar a una mayor parte de la población, se distribuirán diez panes por persona.

El “gasolinazo” provocó también manifestaciones en varias ciudades del país pero las movilizaciones han frenado gracias a las fiestas de fin del año. El lunes la Central Obrera Boliviana, el mayor sindicato del país, planea volver a salir a las calles.

Recordamos que la subida en los precios de los carburantes se debe a la retirada de la subvención estatal de la que éstos gozaban desde antes de la llegada al poder de Evo Morales. Con el dinero que el Estado no gastará en dichas subvenciones, el presidente ha anunciado una subida del 20% del salario mínimo nacional.