El START III podría ser ratificado el 26 de enero
La Duma Estatal, cámara baja del Parlamento ruso, examinará en la reunión plenaria del 25 de enero, y en su tercera lectura final, la nueva edición del tratado ruso-norteamericano para la Reducción de Armas Estratégicas. De ser aprobado por los diputados, el Proyecto de ley de ratificación que lo acompaña pasará a manos de los senadores, que ya se han comprometido a adoptar el START dentro del día siguiente.
El jefe del Comité de Asuntos Internacionales del Consejo de la Federación, Mijaíl Marguélov, informó a la prensa, al término de una reunión ampliada de los comités sectoriales, que la cámara alta estaba dispuesta a ratificar el documento sin ninguna enmienda en el texto. Sí habrían algunas estipulaciones en la ley de ratificación ya aprobadas por la Duma y además han sido elaborados dos declaraciones especiales que, a juicio de los diputados, deberían prescribir detalladamente las condiciones de la presente ratificación. Todos esos pasos son considerados como una respuesta al Senado norteamericano, que había previsto varias reservas para el cumplimiento -o posible incumplimiento- del tratado.
Los documentos mencionados por Marguélov se denominan 'Acerca la postura de la Duma Estatal respecto a la cuestión de la reducción y limitación de los armamentos ofensivos estratégicos' y 'Del mantenimiento de la disposición combativa y el desarrollo de la fuerza nuclear estratégica de Rusia, del complejo de armas nucleares y de los organismos que trabajan en este campo en la industria militar'. Serán votados mañana, primero en la cámara baja. El primer vicepresidente de la Duma, Oleg Morózov, indicó que existía también un proyecto alternativo a la declaración, elaborado por el grupo parlamentario comunista.
Ninguno de los parlamentarios accedió a hacer públicos los textos de las declaraciones, refiriéndose a que se están estudiando todavía. Al mismo tiempo, se informó que el Consejo de la Federación pedirá al presidente Dmitri Medvédev que transfiera el comunicado de los senadores a sus pares norteamericanos. Merguélov agregó a eso que “su idea principal concluye en acertar que la ratificación del tratado no es un punto en el 'reinicio' de las relaciones ruso-norteamericanas y en la discusión sobre la defensa antimisiles, sino unos puntos suspensivos”.
“Estamos a favor de adoptar la ley sobre la ratificación del tratado sobre el desarme nuclear para que entre en vigor y no sea interrumpido [este proceso] —señaló el senador—. Esperamos que nuestros colegas [de EE. UU.] lo hayan ratificado con las mismas intenciones: para cumplirlo”. “La cámara alta está interesada en participar en todos los procesos relacionados con las consultas sobre la reducción de armas estratégicas ofensivas que realizarán Rusia y Estados Unidos”, aseveró.