"Los primeros inmigrantes en Europa no conocían el fenómeno de radicalización, pero sus hijos sí"

Los atentados de Cataluña, que se cobraron la vida de 16 personas y dejaron más de un centenar de heridos, no solo han provocado consternación y dolor en la sociedad española, sino que también han derivado en ataques violentos contra la población musulmana y sus mezquitas, así como en discursos xenófobos e islamófobos en las redes sociales.

Sin embargo, Mohamed Said Alilech, imán de la mezquita de Fuenlabrada (Madrid) y presidente de la Asociación de Jóvenes Musulmanes de España, ha asegurado que los musulmanes sufren este tipo de atentados "doblemente". Por un lado, porque se produce una "estigmatización" de la comunidad musulmana y, por otro, porque son "jóvenes de nuestra propia comunidad" quienes, en su "fanatismo", "su radicalización" y "su ignorancia", cometen atentados terroristas y "atentan en contra de vidas inocentes".

La crisis de identidad, factor clave en los procesos de radicalización

En este sentido, ha subrayado que en las mezquitas "no hay un mensaje violento" y "no se predica la radicalización", por lo que ha pedido que se investigue si el imán de Ripoll, supuesto autor intelectual de los atentados, "realmente era un imán o solo un divulgador". Así, para Alilech, "el problema está fuera" de estos espacios religiosos, ya que "existen personas que utilizan una retórica religiosa basada en el odio y el fanatismo", así como "una lectura manipulada de la religión", para "seducir, manipular o captar a jóvenes vulnerables".

"Aquí no hay solo un factor religioso, sino también otras cuestiones importantes, como el perfil de estos jóvenes, su entorno social, su situación social, su nivel intelectual, su nivel académico, su nivel de pertenencia o 'integración' en la sociedad donde están viviendo", ha añadido Alilech, que considera que es "fácil radicalizar a los jóvenes cuando son vulnerables". Por ello, propone que, además de las medidas de seguridad, se busquen soluciones a temas como el fracaso escolar, la discriminación, la islamofobia y los mensajes irresponsables en los medios de comunicación.

Además, para el imán es muy importante señalar que "estos jóvenes ya son europeos" y que, a diferencia de sus padres o abuelos, que procedían de "unos entornos menos desarrollados", estos jóvenes "se han educado aquí" y "han crecido en la ciudad donde luego han acabado atentando contra vidas humanas". "Hay una crisis de identidad: Han nacido aquí, pero no se sienten de aquí", explica el imán, que asegura que este factor es clave para que estos jóvenes caigan en ideologías violentas y radicales.

8 de cada 10 víctimas del terrorismo internacional son musulmanes

Por otro lado, el imán de Fuenlabrada ha negado que existan "mezquitas clandestinas", ya que es "la propia comunidad musulmana de cada localidad" la que elige a sus imanes. Para ello, la comunidad musulmana debe estar registrada en el ministerio de Justicia como "entidad religiosa" y el "local" debe estar autorizado por las autoridades municipales. Luego, la comunidad religiosa "crea una Junta Directiva", que "contrata" al imán, al que "paga con sus propios recursos económicos".

Respecto a la islamofobia en España, Alilech ha asegurado que procede de grupos que "no dejan de ser una minoría", pero que pese a ello, "el daño que hacen es muy grande". Además, ha criticado que los medios de comunicación contribuyan a una mala imagen de los musulmanes, entremezclando el terrorismo con el islam. "La mayoría de los atentados están perpetrados por musulmanes, pero lo que desconoce la mayoría de la gente es que (…) 8 de cada 10 víctimas del terrorismo internacional son musulmanes y donde más daño están haciendo es en los propios países musulmanes", ha añadido.

Por último, el presidente de la Asociación de Jóvenes Musulmanes de España ha defendido un "plan global" para acabar con el terrorismo, ya que es "un problema de todos". Así, Alilech apuesta por "un plan estratégico social" que invierta "en la concienciación y en la integración", además de cortar "la financiación a estos grupos terroristas", acabar con "las fuentes que tienen de propaganda" y "dar voz a la comunidad musulmana" para que los jóvenes puedan "conocer el verdadero islam".