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Temen que dinero del narco contamine las próximas campañas electorales en México
El Congreso mexicano tendrá que debatir una propuesta del PRI que pretende eliminar la financiación pública de las campañas. ¿Quién las financiará entonces?
El Partido Revolucionario Institucional (PRI) ha propuesto en el Congreso la eliminación de la financiación pública de los partidos políticos, y una drástica reducción de funcionarios públicos: la Cámara de Diputados pasaría de 500 legisladores a 300, y el Senado perdería la mitad de sus 128 representantes, quedando sólo 64 en activo. César Camacho, el líder del PRI en la Cámara baja, estima que la aplicación de estas medidas permitirían que el Estado ahorrase 11.619 millones de pesos. Según sus propias palabras, ese dinero podría "destinarse a la atención y reparación de daños ocasionados por los desastres naturales recientes".
La propuesta sin embargo, no es del agrado de Lorenzo Córdova, presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), que en declaraciones recogidas por el diario 'El País' manifestó que "El cambio solo debe hacerse cuando haya un consenso unánime de todos los jugadores y cuando sea absolutamente necesario para la viabilidad democrática de las elecciones".
La institución presidida por Córdova otorgará a los partidos políticos 6.788 millones de pesos para hacer campaña el próximo año. Se trata de una cifra que crea polémica en la sociedad mexicana, en la que existe una creciente desconfianza hacia su clase política, debida en gran parte a los numerosos y graves casos de corrupción. Córdova reconoce que hay "excesos en los montos que se destinan a financiar la política", a la vez que cree que "los políticos están asumiendo un sentimiento de culpabilidad y esta propuesta tiene una buena dosis de demagogia".
En cualquier caso, la propuesta del PRI tendrá que ser aprobada por el Congreso. El peligro de que salga adelante radica en que podría favorecer la entrada en el escenario de la financiación electoral a diversos intereses económicos de dudosa legitimidad. "En este país hay muchos dispuestos a financiar la política. Desde intereses criminales a corporativos. Nadie puede negar el riesgo que esto supone… Lo planteo con exceso y mucha preocupación: ¿De veras queremos que el narco financie las campañas?", manifestó Córdova.
La campaña a la presidencia del próximo año tendrá un tope de gasto de 430 millones de pesos y un límite de 100 millones de pesos para el dinero público que puede recibir un candidato.
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