Washington busca entre bastidores una vía diplomática directa con Pionyang pese al rechazo de Trump
Joseph Yun, responsable estadounidense de las negociaciones con Corea del Norte, ha mantenido contacto con diplomáticos en la misión de Naciones Unidas en Pionyang en un momento difícil, precisamente cuando el cruce de insultos entre el presidente de EE.UU., Donald Trump, y el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, vienen alimentado los temores a un conflicto militar, informa Reuters.
Los comentarios del secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson, acerca de que "los esfuerzos diplomáticos con Corea del Norte continuarán hasta que caiga la primera bomba", fueron la señal más clara de que Estados Unidos estaba discutiendo directamente cuestiones más allá de la liberación de prisioneros estadounidenses, y pese a que Trump declarara que las conversaciones con el país coreano "no son la respuesta".
The U.S. has been talking to North Korea, and paying them extortion money, for 25 years. Talking is not the answer!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 30 de agosto de 2017
Aunque el objetivo de Yun pasa por mejorar las relaciones diplomáticas, aún no hay indicadores de que las comunicaciones entre bastidores hayan mejorado la difícil situación causada por las pruebas nucleares de Corea del Norte, la muerte del estadounidense Otto Warmbier días después de su liberación por Pionyang y la detención de otros tres ciudadanos norteamericanos.
Yun insiste a sus interlocutores norcoreanos en la necesidad de que dejen de probar bombas y misiles nucleares, ese a las sugerencias de algunos funcionarios estadounidenses y surcoreanos de que las conversaciones con Pionyang no van a ninguna parte.
Corea del Norte, que realizó este año su sexta y más potente detonación nuclear, ha probado una serie de misiles, incluidos los misiles balísticos intercontinentales (ICBM) que, de ser perfeccionados, podrían alcanzar el territorio continental de EE.UU.
- El desarrollo de los acontecimientos en torno a la península coreana "fortalece" la posición de Pionyang y demuestra que "necesita armas nucleares para repeler posibles ataques de EE.UU", aclaró la directora del departamento norteamericano de la Cancillería norcoreana, Choe Son-hui, el pasado 20 de octubre en en una conferencia de no proliferación celebrada en Moscú. "No vamos a negociar las armas nucleares y EE.UU. tendrá que convivir con el estatus nuclear de Corea del Norte", dijo.
- Durante su discurso en las Naciones Unidas el pasado mes de septiembre, Trump prometió "destruir totalmente" a Corea del Norte si amenazaba a Estados Unidos o a sus aliados, lo que aumentó la tensión sobre la posibilidad de un conflicto militar.
- El jefe de la Inteligencia estadounidense, Mike Pompeo, subrayó recientemente que Trump estaría dispuesto a recurrir al uso de la fuerza para evitar que el líder norcoreano "tenga capacidad de mantener bajo amenaza a EE.UU.".