La Bolivia plurinacional
En primer lugar, en la discusión se plantea la pregunta de qué es un "Estado plurinacional" y si se puede considerar que Bolivia lo sea.
"Esta concepción política se trae a la Asamblea Constituyente y se construye el concepto de Estado plurinacional", cuya característica es el "reconocimiento de pueblos indígenas que tiene Bolivia y su diversidad cultural", explica el abogado y escritor Idón Moisés Chivi, que también es analista político del partido Movimiento al Socialismo.
Dado que Bolivia es un país multiétnico, su organización "en gran medida tiene que reflejar esta realidad" y lo hace "dentro de un modelo democrático", agrega el exvicepresidente de Bolivia, Víctor Hugo Cárdenas.
"El Estado plurinacional es un pretexto" que "no representa a las naciones reales", sostiene en su turno el doctor en ciencias económicas y director de la revista 'Ayra. La Voz Libertaria', Fernando Untoja. Tras recordar que "las naciones más importantes" del país altiplánico son los aimaras y los quechuas, señala que "nadie" habla los idiomas de estos pueblos "a nivel de la izquierda boliviana" ni se han cambiado "las estructuras feudales ni burocráticas". Por estos motivos, opina que en Bolivia "no existen indígenas", sino solo pueblos concretos: "Hemos caído en una copia del viejo Estado soviético, pero con fachada indígena", sostiene.
¿Naciones que "no tienen Estado"?
A juicio de Untoja, los aimaras y los quechuas "no están en un Estado plurinacional", sino "son naciones que no tienen Estado", dado que este concepto es "la invención de una fuerza política oligárquica de izquierda que impone este Estado justamente para negar" a estos dos pueblos, "desconocerlos y meterlos en una bolsa que se llama 'mundo indígena'".
No obstante, Chivi defiende que Bolivia solo atraviesa un "doloroso y difícil proceso de descolonización" que requiere descolonizar una gran variedad de "estructuras mentales y hábitos institucionales". En este sentido, afirma que el país ha logrado "incorporar los saberes indígenas —desconocidos, olvidados, rechazados y odiados— a estructuras del Estado".