El arte glacial llega a Moscú para quedarse en invierno y en verano

Desde las épocas remotas en Rusia existe la tradición de hacer figuras de nieve. Pero la moda de erigir esculturas de hielo la introdujo el emperador ruso Pedro el Grande en el siglo XVIII, cuando ordenó construir la primera “casa glacial”. Y hasta ahora las figuras de hielo parecen una parte imprescindible de la decoración navideña de Moscú y otras ciudades rusas.

Hoy en el marco del festival navideño 'El Invierno Ruso' en la capital Moscú ha sido instalada  una composición glacial de casi 2 metros de altura y más de 200 kilos de peso. Las figuras que la componen (un gato y un conejo, los símbolos del año que viene según la astrología china) han sido labradas por los campeones mundiales del tallado en hielo, que luego mostraron el resultado artístico a todos los interesados. Como parte de este certamen en la plaza donde se ubica la ‘helada’ exposición también abre sus puertas una feria de artesanía.

Por otra parte, el pasado 8 de diciembre ya se inauguró el Museo de Hielo de Moscú. Los objetos expuestos en el museo son muy variados: desde personajes de cuentos, hasta habitaciones con muebles. En el pabellón, de unos 700 metros cuadrados, se mantendrá a una temperatura constante de -10º C durante todo el año, por lo que en verano a los visitantes se les ofrecerán cazadoras.